A pesar de que el régimen de Tel Aviv le concediera a la congresista demócrata Rashida Tlaib una visa “humanitaria” para que pudiera visitar a sus familiares y, especialmente, a su abuela en la ocupada Cisjordania, la legisladora ha afirmado que no irá.
Tlaib ha expresado que su razón para no visitar el pueblo de su familia se debe a que no puede aceptar “las condiciones opresivas” que Israel le obligaría a cumplir.
Tlaib afirmó entonces a través de Twitter:
“Cuando gané, el pueblo Palestino se sintió esperanzado de que alguien finalmente hablara la verdad sobre las condiciones inhumanas [que viven]. No puedo permitir al Estado de Israel que se roben esa luz al humillarme y usar el amor [que siento] por mi abuela para que me arrodille a sus políticas opresoras y racistas”.
Tlaib agregó:
“Silenciarme y tratarme con una criminal no es lo que [mi abuela] quiere para mí. Mataría una parte de mí. He decidido que visitar a mi abuela bajo estas condiciones se opone a todo en lo que creo – luchar contra el racismo, la opresión y la injusticia”.
Silencing me & treating me like a criminal is not what she wants for me. It would kill a piece of me. I have decided that visiting my grandmother under these oppressive conditions stands against everything I believe in–fighting against racism, oppression & injustice. https://t.co/z5t5j3qk4H
— Rashida Tlaib (@RashidaTlaib) August 16, 2019
La decisión de la congresista se enmarca en la visita política que tenía planeada hacer con su compañera demócrata Ilhan Omar con el fin de visitar Cisjornadia y Jerusalén para denunciar los abusos a los derechos humanos por parte de Israel y la ocupación ilegal de las tierras palestinas.
No obstante, a ambas congresistas se les prohibió entrar a Israel por su continuo y público apoyo al movimiento BDS (Boicot, Desinversión, Sanciones), que busca a través de medios pacíficos detener el apartheid israelí en contra del pueblo palestino.
A razón de esto, Tlaib se dirigió al Ministro de Interiores israelí, Aryeh Deri, para solicitarle que le diera permiso de visitar la ocupada Cisjordania para visitar a su abuela de 90 años, a quien probablemente no podría volver a ver, y prometió que no abogaría por el boicot a Tel Aviv durante su viaje.
Rashida Tlaib, de 43 años, es la primera mujer palestino-estadounidense en ser electa como representante en el Congreso de los Estados Unidos. Asimismo, es una de las primeras dos mujeres musulmanas en representar a dos estados en la legislatura del país norteamericano.
Tlaib representa a Michigan, estado en el que nació. Sin embargo, sus raíces están en la villa Beit al-Fauqa de la ocupada Cisjordania.
La otra congresista musulmana es Ilhan Omar, quien nació en Somalia pero reside en Estados Unidos desde su infancia.