Más de 1.000 personas han muerto a causa de la crisis epidemiológica de dengue en el país del sureste asiático, Filipinas, en lo que va de año, reporta Al Jazeera en un trabajo especial.

De acuerdo al medio con sede en Doha, Catar, Filipinas se estaría enfrentando actualmente a su peor crisis de dengue desde el 2012, año en el que se reportaron un total de 187.031 casos de la enfermedad transmitida por mosquito.

Este año, no obstante, para finales de agosto, el Departamento de Salud de Filipinas confirmó un total de 271.480 casos de esta enfermedad.

Ya el 6 de agosto, de hecho, el Departamento de Salud había declarado una epidemia nacional de dengue luego de que se reportaran 622 muertes como consecuencia de la afección. Este número aumentó y actualmente se posiciona en más de 1.107 personas muertas desde enero hasta el 31 de agosto.

De este número, la mayoría de las víctimas eran niños de entre cinco y nueve años de edad.

“Los niños son particularmente susceptibles al dengue, porque ellos tienen un sistema inmunológico más débil en comparación con los adultos”, explicó el funcionario de salud y nutrición de Save The Children Philippines, Armando Parawan.

Dengue
Foto: Romeo Ranoco/Reuters

De acuerdo a Al Jazeera, un programa de vacunación contra el dengue fue suspendido abruptamente en el 2016 luego de que se cuestionara la seguridad de la vacuna “Dengvaxia”.

La Organización Mundial de la Salud, en un reporte, estima que Filipinas es el país de Asia más afectado por el dengue, especialmente en cuanto a las muertes. No obstante, advierte que países vecinos de la región del sureste asiático se encuentran en condiciones similares ligadas a esta enfermedad, con miles de casos confirmados.

La OMS indica que 124.751 casos de dengue fueron reportados en Vietnam, mientras que Malasia tiene unos 85.270. Singapur, por su parte, ha contabilizado 10.206 casos de dengue para finales de agosto, lo que representa tres veces los datos registrados el año pasado en el mismo período.

El dengue es una enfermedad infecciosa transmitida por el mosquito Aedes aegypti y que provoca síntomas similares a la gripe en quienes padecen la afección.

Además de los síntomas tipo gripe, los pacientes con dengue sufren de dos a siete días de fiebre intensa, la cual puede remitir temporalmente al tercer día, dando la ilusión de que el afectado ya está mejorando.

No obstante, de acuerdo a la doctora Leila Jane Narag, quien trabaja en el hospital filipino de Tondo, en Manila, esta es la fase crítica de la enfermedad que debe ser cuidadosamente monitoreada, pues podría progresar al dengue grave o severo, también conocido como hemorrágico.

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