Este martes por la noche, un sismo de 6.0 grados en la escala de Richter sacudió a la provincia argentina de Mendoza, ubicada al Oeste del país suramericano.

El sismo tuvo lugar a las 20:10 PM (23:10 GMT), a 14 kilómetros de profundidad, y de acuerdo al Instituto de Prevención Sísmica en su portal web, el epicentro fue localizado en una zona inhabitada, a más de 60 kilómetros de la población más cercana.

Debido a la intensidad del movimiento telúrico, el mismo se sintió levemente hasta la capital, la ciudad de Buenos Aires. Sin embargo, no hubo víctimas mortales ni daños materiales por reportar, de acuerdo a informes oficiales y testimonios.

Vecinos de la ciudad de Buenos Aires se comunicaron con medios radiales para preguntar por un movimiento oscilante que afectó a objetos colgantes. Más allá de eso, no hubo mayor información sobre otros posibles daños.

El temblor, igualmente, se sintió en Córdoba, San Juan y Neuquén, entre otras ciudades, y tras su paso, los ciudadanos tomaron las redes sociales para comentar su experiencia y subir vídeos del fenómeno natural.

De acuerdo al portal de Clarín, en Mendoza el temblor se sintió de forma prolongada, mientras que en Buenos Aires lo detectaron quienes se encontraban en pisos altos de los edificios.

“Hasta el momento no hay reportes de daños. Pero sin ninguna duda por la magnitud y la distancia, puede haber inconvenientes en viviendas precarias”, detalló Alejandro Giuliano, director nacional de Prevención Sísmica, en declaraciones para TN.

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Foto cortesía: Infobae

Según el primer reporte del movimiento telúrico, el mismo habría tenido una intensidad de 6.3 grados a 10 kilómetros de profundidad. Sin embargo, los datos fueron actualizados al poco tiempo por el Instituto Nacional de Prevención Sísmica (Inpres).

De acuerdo a este ente de sismología, también se registró una réplica en la misma zona. Esta vez, el segundo temblor tuvo una intensidad de 4,4 grados a 10 kilómetros de profundidad.

A la media hora, hubo una tercera réplica, la cual se posicionó en 3,2 grados en la escala de Richter.

Un sismo de 6.0 grados en la escala de Richter es considerado de alto impacto y puede causar daños materiales importantes en zonas pobladas, dependiendo de la cultura sísmica y cómo estén hechas las construcciones, así como la profundidad del terremoto.

En este sentido, de acuerdo a la escala establecida, de haber tenido lugar en el epicentro en áreas urbanas, podría haber causado destrozos de consideración.

Desde noviembre del año pasado, apenas siete sismos fueron catalogados con una magnitud de 6 grados o más por el Inpres.

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