La reina Isabel lanzó una declaración innovadora después de la cumbre de la familia real en Sandringham para hablar sobre la decisión del príncipe Harry y Meghan Markle de renunciar como miembros de la realeza. La reunión llegó a su fin después de una discusión de dos horas y media este lunes, 13 de enero.
“Hoy mi familia tuvo discusiones muy constructivas sobre el futuro de mi nieto y su familia”, dijo la Reina en un comunicado. “Mi familia y yo apoyamos por completo el deseo de Harry y Meghan de crear una nueva vida como familia joven. Si bien hubiéramos preferido que siguieran siendo miembros de la familia real que trabajan a tiempo completo, respetamos y entendemos su deseo de vivir una vida más independiente como familia sin dejar de ser una parte valiosa de mi familia”.
Harry y Meghan han dejado en claro que no quieren depender de fondos públicos en sus nuevas vidas. Por lo tanto, se acordó que habrá un período de transición en el que los Sussex pasarán tiempo en Canadá y el Reino Unido. Estos son asuntos complejos para que mi familia los resuelva, y aún queda trabajo por hacer, pero he pedido que se tomen las decisiones finales en los próximos días, agregó.
Fuentes del señalaron según la revista People que la Reina ordenó a Harry, el Príncipe William y el Príncipe Carlos que se reunieran el lunes en su casa de campo para “discutir las cosas”. Se creía que Meghan había llamado desde Canadá.
Otra fuente le dijo al mismo medio señalado que era probable que Meghan participara en la discusión del lunes por teléfono, ya que recientemente regresó a la isla de Vancouver, Canadá, donde ella y Harry pasaron las vacaciones junto con su hijo Archie.
Harry, de 35 años de edad, y Meghan, de 38 años de edad, sorprendieron al mundo con su decisión de “dar un paso atrás como miembros ‘senior’ de la Familia Real” la semana pasada. Revelaron sus planes para “forjar un nuevo papel progresivo dentro de esta institución”, escribieron en un comunicado en Instagram.
A pesar de que han decidido “dar un paso atrás como miembros ‘senior’ de la Familia Real y trabajar para ser financieramente independientes”, la pareja firmó su correspondencia como Duque y Duquesa de Sussex, por lo que no es probable que se estén deshaciendo de sus títulos.
Según diversos medios la decisión de Meghan y Harry dejó a los miembros de la realeza “dolidos” y “profundamente decepcionados”.
La cumbre familiar sin precedentes sigue a una serie de debates de emergencia en los últimos días y plantea la posibilidad de que se encuentre una solución que funcione para los Sussex y la familia real. La reunión fue la primera vez que habían estado juntos desde el fin de semana del Día del Recuerdo en noviembre.