El mandatario, Donald Trump, informó este martes, 18 de junio, que conversó con su par chino, Xi Jinping, y que los equipos de ambos países reanudarán las estancadas negociaciones comerciales para preparar una reunión entre los mandatarios en la cumbre del G-20 que se realizará a finales de mes.
Es importante recordar que EE.UU. y China están en medio de una guerra comercial que ha presionado a los mercados financieros y ha dañado a la economía mundial.
En consecuencia, estas conversaciones entre las dos partes tienen el objetivo de alcanzar un acuerdo general. Esto lo intentaron realizar el mes pasado pero se estancó y desde entonces los diálogos han sido limitados.
El presidente de EE.UU. no ha ocultado su deseo de reunirse con Xi en la reunión del G-20 en Japón la próxima semana, a pesar de que amenazó con escalar la disputa comercial imponiendo más aranceles a los bienes chinos sino llegan a un acuerdo.
Autoridades chinas no han confirmado la cita
Si bien, Trump destacó que posiblemente se reúna con Xi, las autoridades chinas no han confirmado la cita.
Incluso, en una publicación en su cuenta oficial de Twitter, Trump comentó que alcanzó un acuerdo con Xi durante una conversación telefónica para desarrollar el camino de su reunión.
“Tuve una muy buena conversación con el presidente Xi de China. Tendremos una reunión extendida la próxima semana en el G-20 en Japón. Nuestros respectivos equipos comenzarán las conversaciones previas a nuestra reunión”, expresó Trump.
Had a very good telephone conversation with President Xi of China. We will be having an extended meeting next week at the G-20 in Japan. Our respective teams will begin talks prior to our meeting.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 18 de junio de 2019
Estos comentarios tranquilizaron las preocupaciones que apuntaban a que la reunión no se llevaría a cabo, lo que habría sido visto como un desaire hacia Washington y podría haber generado otra ronda de aranceles.
Los funcionarios de la Casa Blanca se negaron a entrar en detalles sobre los preparativos o los resultados esperados de las conversaciones en Japón, pero ambas partes insistieron en sus posiciones.
Funcionarios de EE.UU. solicitaron cambios estructurales en la economía de China y en cómo Pekín trata a los negocios estadounidenses; mientras China pidió diálogo en lugar de tarifas caras.
“La clave es mostrar consideración a las preocupaciones legítimas de los demás”, remarcó Xi a los medios estatales chinos.
“También esperamos que EE.UU. trate a las empresas chinas de manera justa. Estoy de acuerdo en que los equipos económicos y comerciales de los dos países mantengan un diálogo sobre cómo resolver las diferencias”, señaló.
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Historial de aranceles
Washington ya ha impuesto aranceles del 25% a USD 250 mil millones de productos chinos, que van desde tecnología a muebles, que se importan a EE.UU. No obstante, el mandatario de EE.UU. amenazó con poner impuestos a otros productos por USD 325 mil millones, lo que incluiría todas las importaciones chinas restantes.
