¿Sabías que las mascotas necesitan atención de salud mental?

Las mascotas también toman medicamentos, reciben terapia y se recuperan igual que nosotros.

A medida que más de nosotros nos estamos dando cuenta de lo importante que es tratar la salud mental de nuestras mascotas, es más importante que nunca preguntar qué está causando la angustia en primer lugar. Entre nuestras vidas agitadas y el ambiente moderno y ruidoso, podemos ser más responsables de sus problemas.

Así que hoy en Notiboom te hemos traído 4 trastornos mentales humanos que afectan a las mascotas también.

1. Trastorno de estrés postraumático

Las mascotas de servicio a menudo se recomiendan para personas que sufren de trastorno de estrés postraumático y pueden ser de gran ayuda en su recuperación.

El TEPT, o trastorno de estrés postraumático, es una respuesta a un evento traumático en el que un individuo amenazó o sufrió un daño grave. Presenta ataques de pánico, flashbacks y otros síntomas de ansiedad.

Para las mascotas, es lo mismo. Los gatos y los perros pueden desarrollar TEPT por ser abandonados en un refugio o durante desastres naturales masivos.

Los perros en particular a menudo lo adquieren después del servicio militar o policial.  Estos perros a menudo son introducidos a estímulos como disparos y explosiones en un ambiente de entrenamiento controlado, pero la diferencia entre el entrenamiento y la realidad es enorme.

El Trastorno de estrés postraumático o trastornos similares aparecen en todo el reino animal.

Las aves abandonadas, especialmente los loros, muestran signos del trastorno. Caminan, repiten frases inquietantes y llaman a los miembros de la familia que faltan.

Estas aves a veces se emplean para dar compañía y comodidad a las personas que sufren TEPT.

Las ratas que han estado expuestas a eventos traumáticos en los laboratorios también pueden sufrir de este trastorno.

Para ayudar a las mascotas con TEPT, es necesario buscar la ayuda de un profesional.

La terapia es invaluable para ayudar a las mascotas a aprender a procesar su trauma y entrenarlas para que respondan adecuadamente. A menudo se prescribe un antidepresivo tricíclico para aliviar la angustia, pero también es fundamental brindar a las mascotas con TEPT un retiro seguro y aislado donde puedan descansar sin preocupaciones.

2. TOC

El trastorno obsesivo-compulsivo tiende a simplificarse en exceso en una conversación informal. Si a alguien le gustan las cosas de una manera determinada o limpia un poco más de lo normal, las personas pueden etiquetarlas como «OCD».

Los gatos también obtienen esta reputación por sus meticulosos hábitos de baño y preferencias meticulosas. Pero, al igual que con las personas, el TOC tiene mucho más que ver con las obsesiones y las compulsiones.

De hecho, el TOC a veces se expresa de una manera que hace las cosas menos ordenadas y limpias. Los gatos con TOC pueden participar en el aullido y la estimulación ruidosa y repetitiva. También pueden desgarrar nuestros muebles y dejar de usar su caja de arena.

En los perros, los síntomas son muy similares. Pero, algunas razas de perros son más propensas al TOC que otras.

El tratamiento para las mascotas con TOC es como la mayoría de los tratamientos de salud mental. Los veterinarios primero descartan otras causas y luego observan detenidamente el comportamiento y el entorno en el que se desarrolla.

Un ambiente hostil o impredecible hará que una mascota se sienta más ansiosa.

El confinamiento también es una mala idea, ya que las mascotas con TOC a menudo se ponen nerviosas cuando se sienten atrapadas.

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3. Alzheimer

Muchos dueños de mascotas rechazarán el extraño comportamiento de su compañero, especialmente a medida que el animal envejece, pero los cambios repentinos son un asunto serio para las mascotas más viejas. Es normal que las mascotas disminuyan la velocidad a medida que envejecen y pierden la vista o el oído.

Sin embargo, su capacidad mental no debe disminuir significativamente.

Esto puede indicar que una mascota tiene el síndrome de disfunción cognitiva, o CDS, el tipo de demencia que es particular de los perros y gatos y que se parece mucho al Alzheimer en los seres humanos.

Las mascotas con este trastorno pueden olvidar rutinas bien establecidas, vagar sin rumbo y sin descanso, volverse agresivas o perderse fácilmente. También pueden olvidar a las personas que han vivido con toda su vida y reaccionar como si esas personas fueran extrañas.

Lo extraordinario de los CDS en gatos y perros es que las enfermedades similares a la enfermedad de Alzheimer no aparecen en muchos animales.

El tratamiento para CDS se enfoca en disminuir la progresión con dieta y ejercicio. El suplemento SAM-e se prescribe a menudo en humanos y animales para la degeneración cognitiva. También se prescribe para controlar el dolor, curar el daño de la médula espinal y para tratar la osteoporosis.

Las dietas especialmente formuladas que incluyen antioxidantes y ácidos grasos pueden ayudar a los cuerpos de las mascotas a luchar contra la aparición.

Al igual que los humanos con Alzheimer en etapa temprana, los veterinarios sugieren que las mascotas que sufren de CDS reciben más estimulación mental y ejercicio.

4. Trastornos del sueño

Tanto los gatos como los perros pueden sufrir de algunos trastornos del sueño.

La narcolepsia puede hacer que las mascotas se colapsen en un sueño profundo, la apnea del sueño puede destruir la calidad del sueño y colapsar las vías respiratorias, y el trastorno de comportamiento REM puede hacer que los perros se levanten y corran hacia las paredes mientras duermen.

El insomnio es, con mucho, el trastorno del sueño más discutible en las mascotas que en los humanos. Los dueños de gatos a menudo describen a sus gatos como insomnes, pero esto a menudo se debe a una mala interpretación del ciclo del sueño del gato.

Los gatos son crepusculares, lo que significa que son más activos alrededor del atardecer y el amanecer. En los perros, el insomnio es raro pero ocurre.

Tanto los gatos como los perros pueden beneficiarse de hacer más actividad durante el día y pueden entrenarse para calmarse cerca de la hora de acostarse.

Ahora bien, el insomnio es una preocupación más grande en las mascotas mayores. Si la disfunción cognitiva afecta a un perro o gato envejecido, a menudo se desarrolla insomnio, junto con varias otras enfermedades mentales como la depresión y la ansiedad.

El tratamiento de los trastornos del sueño varía. La narcolepsia es incurable pero manejable. La apnea del sueño puede requerir cirugía para reparar una vía aérea obstruida.

La melatonina, la acupuntura y los medicamentos a base de hierbas pueden ayudar con el insomnio, pero los veterinarios a veces también prescriben una dieta especial rica en ácidos grasos omega-3 y antioxidantes.

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