Tiene aterrorizados y enfurecidos a los habitantes del barrio O Calvario, de Vigo, donde es conocido por ir armado con navaja, punzón y un bastón para agredir a los vecinos.
Al principio no sabían quién era el que rayaba sistemáticamente, y por los cuatros costados, todos los coches aparcados en la zona.
Poco a poco, comerciantes y habitantes agudizaron la vigilancia y comprobaron que el autor de esos destrozos era un anciano de 79 años.
No se conforma con rayar coches
El año pasado más de 1000 coches fueron rayados por él, y en este primer mes de 2019 la cifra ya pasa de los 120. Se estima que los perjuicios causados por sus destrozos ascienden a casi medio millón de Euros.
Cuando algún vecino se ha encarado con él, para echarle en cara su vandalismo, José no ha dudado en agredirles.
A veces, al ser sorprendido cometiendo alguna de sus fechorías, se ha puesto violento y ha golpeado a sus víctimas, valiéndose de lo que tenga a mano, generalmente algún paraguas o bastón.
Hace poco tiempo le rompió la nariz y las gafas a un hombre que le había sorprendido rayando su vehículo.
Pero José no se conforma únicamente con destrozar coches; también se dedica a meter palillos en las cerraduras de las casas, para después romperlos y, al quedar la mitad de estos dentro, si los propietarios quieren volver a entrar en su vivienda no les queda más remedio que llamar a un cerrajero.
A causa de esto, y aunque no es cosa de broma, muchos le llaman jocosamente «el señor de los palillos».
Los vecinos del barrio O calvario ya no pueden más; «ya son más de diez años soportándolo», declaraba desesperado uno de ellos.
La dueña de un conocido comercio contaba también que casi todas las semanas se encuentra su negocio con la puerta bloqueada por él. Incluso, han desarrollado un sistema, con un ganchito, para sacar el palillo y así no tener que llamar al cerrajero cada vez.
Hartos de sufrir a José, han decidido imprimir montones de carteles con su cara para pegarlos por todo el barrio y alrededores. En ellos puede leerse el siguiente texto:
Se busca: Este es el viejo que raya coches y mete palillos en las cerraduras. Si lo ves, vigila y llama a la policía.
Él, no se da por aludido y sigue a lo suyo. Otra vecina contó que, aunque ya lo han detenido varias veces, a los 3 días lo ponen en libertad y todo vuelve a comenzar.
Fuentes de la policía han contado que cada vez que le detienen es puesto a disposición judicial pero que los delitos que él comete (daño a vehículos) están penados solamente con una multa y enseguida queda de nuevo en la calle.
Sin embargo, tiene pendiente un juicio al que no se presentó y todavía tiene que celebrarse en el juzgado en el juzgado de lo penal número 1 de Vigo.
Durante una de las detenciones, se le realizaron varios exámenes psiquiátricos al anciano, pero estos arrojaron como resultado que no tiene ningún tipo de problema psíquico que explique su comportamiento.
«Lo suyo es pura maldad», concluyen varios de los vecinos a los que sigue amargando la vida.