El presidente en funciones de Bolivia, Evo Morales, ha convocado este domingo a la realización de nuevas elecciones tras dos semanas de fuertes manifestaciones ante las sospechas de fraude electoral, así como el informe de la Organización de Estados Americanos (OEA), el cual recomienda nuevos comicios.
“He decidido convocar a nuevas elecciones nacionales para que mediante el voto se permita al pueblo boliviano elegir democráticamente a sus nuevas autoridades, incorporando a nuevos actores políticos”, señaló el mandatario en una breve declaración en la que no citó el informe de la OEA.
Asimismo, Morales anunció que acordó la renovación de todos los miembros del Tribunal Supremo Electoral por parte del Parlamento boliviano en un proceso que iniciará próximamente.
Hasta el momento, no se han concretado fechas para la realización de estos nuevos comicios. Sin embargo, Morales explicó que tomó la decisión con el fin de aliviar la tensión y “pacificar Bolivia”.
Y es que, desde que se levantaron las sospechas de un posible fraude electoral en las votaciones del pasado 20 de octubre, se han suscitado en la nación andina fuertes enfrentamientos entre el pueblo opositor y los simpatizantes del gobierno de Morales, dejando por lo menos tres personas fallecidas y 384 heridos, de acuerdo a datos oficiales de la Defensoría del Pueblo de Bolivia.
Evo Morales, quien gobierna Bolivia desde el año 2006, había sido el claro triunfador de la primera vuelta presidencial luego de que se publicaran los datos preliminares el mismo domingo de los comicios. Entonces, con 45,28 % de los votos para Morales frente al 38,16 % de Carlos Mesa, era más que probable un balotaje para el desempate técnico. Sin embargo, para el lunes, el Tribunal Supremo Electoral anunció que el actual mandatario era electo presidente sin necesidad de la segunda ronda.
Según los datos oficiales contabilizados por el TSE, y anunciados a finales de esa misma semana, Morales habría obtenido el 47,07 % de los votos a su favor, mientras que Mesa se hizo con el 36,51 %.
OEA asegura que victoria de Morales es estadísticamente improbable
Debido a los disturbios en la nación suramericana por las denuncias de fraude, el gobierno de Bolivia acordó con la Organización de Estados Americanos la realización de una auditoría para determinar si era necesaria o no una nueva convocatoria a elecciones.
Este informe, el cual fue publicado a través del portal de la organización regional, determina que es recomendable un nuevo proceso electoral, pues los resultados oficiales del Tribunal Supremo Electoral no pudieron ser validados durante la auditoría.
El documento de 13 páginas también añade que existieron manipulaciones al sistema informático, el cual debe ser profundamente investigado debido a su magnitud, y que hubo alteraciones en las actas físicas, así como firmas falsificadas, impactando la integridad del cómputo oficial.
Por otro lado, la OEA advierte que, a pesar de que Morales sí podría haber sido el vencedor de la primera vuelta presidencial, sí resulta estadísticamente improbable que el actual mandatario hubiera obtenido el 10 % de diferencia que le habría permitido la victoria absoluta.