Tras una breve reapertura a primera hora en la mañana, el aeropuerto de Hong Kong ha cancelado nuevamente todos sus vuelos y es que centenares de manifestantes han vuelto a tomar el terminal aéreo de la ciudad china, imposibilitando así las operaciones.
La protesta consta de una sentada pacífica y esta es la segunda de la semana que obliga a suspender actividades laborales en el importante aeropuerto. Desde la cancelación de las actividades el día lunes a las 4:00 PM, hora local, más de 300 vuelos de entrada y salida se han visto afectados.
La protesta del pueblo hongkonés se enmarca en las masivas movilizaciones que ocurren en la ciudad desde hace dos meses y, el día de ayer, las mismas entraban en su onceava semana. En un inicio, los manifestantes tomaron las calles para rechazar una ley de extradición que amenazaba con censurar e intimidar a los ciudadanos opositores al gobierno de la República Popular de China.
No obstante, los objetivos de las protestas se han expandido desde entonces y, actualmente, repudian la respuesta policial violenta ante las protestas y exigen la renuncia de la líder de Hong Kong, Carrie Lam.
Foto: Kin Cheung (Associated Press)
Al respecto, Naciones Unidas ha emitido un comunicado para urgir a las autoridades hongkonesas a tomar medidas con restricción y a investigar la actuación de los oficiales de seguridad durante las protestas del domingo, en las que los manifestantes fueron reprimidos “de un modo contrario a la legislación internacional”.
El pasado domingo 11 de agosto, el pueblo de Hong Kong volvió a salir a las calles para protestar y fueron reprimidos duramente por las fuerzas de seguridad, convirtiendo así la jornada en la más violenta hasta entonces, con un saldo de 45 heridos, dos de ellos de gravedad, y varios detenidos.
Entre los heridos, se encuentra una chica que recibió el impacto de un perdigón en el rostro, lo que provocó que perdiera la visión de un ojo y hasta el momento solo se conoce que sigue ingresada en el hospital.
¿Por qué el aeropuerto?
El pueblo de Hong Kong, con la sentada de este martes, ha tomado el aeropuerto un total de cinco veces, desde que decidieran protestar en el concurrido terminal por primera vez el pasado viernes.
Para los manifestantes, este escenario para sus exigencias pacíficas es obvio: concienciar a los turistas y todo aquel que entre y salga de Hong Kong, por las razones que sean, sobre la situación política y social que actualmente están viviendo en el centro económico de China.
Foto: Reuters
Y a pesar de que nadie ha logrado entrar a la ciudad desde hace varias horas, los hongkoneses logran su cometido con el retraso de cientos de vuelos y la incertidumbre en miles de personas sobre si podrán cumplir con sus agendas.
El aeropuerto de Hong Kong es un punto clave en la comunicación aérea mundial, tanto de pasajeros como de carga. En 2017, El Aeropuerto Internacional de Hong Kong sirvió a poco menos de 73 millones de personas, lo que lo convierte en el octavo aeropuerto más transitado del mundo y el tercero de Asia, por detrás de Pekín y Tokio.