La cantante estadounidense Taylor Swift, quien será homenajeada con el premio “Artista de la Década” en los American Music Awards 2019, ha recibido luz verde para presentar sus más viejas canciones en la prestigiosa gala.
A través de un comunicado, este lunes, Big Machine Records aseguró que ambas partes “habían llegado a un acuerdo de licencia que aprueba que las presentaciones de sus artistas puedan transmitirse online después del show para reemisión en plataformas mutuamente aceptadas”.
Este nuevo acuerdo entre Swift, Scott Borchetta (fundador de Big Machine Records) y Scooter Braun (manager de artistas como Ariana Grande, Demi Lovato y Justin Bieber) llega después de que Swift asegurara a través de su cuenta en Twitter que ambos empresarios no la dejaban presentar su música más antigua, debido a que eso significaría que estaba grabándola nuevamente antes de tiempo.
“No sé qué más hacer”, escribió Swift en su red social, donde agregó cuatro pantallazos con un comunicado en el que aseguró que tanto Borchetta como Braun solo le dejarían tocar sus canciones si aceptaba no grabar copias de las mismas el año que viene y si dejaba de hablar de ellos en público.
Igualmente, dijo que los nuevos socios estaban bloqueando la posibilidad de que Netflix utilizara su música y otros materiales audiovisuales para un documental sobre la carrera musical de Swift.
“[Braun y Borchetta] están ejerciendo un control tiránico sobre alguien que solo quiere tocar la música que escribió”.
“Esto es INCORRECTO. Ninguno de estos hombres puso una mano para escribir estas canciones. Ellos no hicieron nada para crear la relación que tengo con mis fans”, agregó la cantante.
Al respecto de las aseveraciones de Swift, Big Machine Records se defendió y aseguró al portal TMZ que ellos “no tienen el derecho de no permitirle [a Swift] presentarse en vivo en ningún lugar”. La compañía, sin embargo, no comentó si estaba tratando o no de bloquearle la posibilidad de cantar hits antiguos como “We Are Never Getting Back Together”, “Blank Space”, “Love Story” o “Shake It Off”, reporta The Guardian.
“Debería ser notado que los artistas de grabación no necesitan permiso de la compañía para presentaciones en vivo en televisión o en cualquier evento en vivo”, agregó BMR.
No obstante, el público en general, así como los colegas de Swift e, incluso, altos personajes de la política estadounidense se pusieron ampliamente de lado de Taylor, poniendo la balanza a favor de la exemponente de la música country.
La senadora demócrata Elizabeth Warren, por ejemplo, escribió: “Desafortunadamente, Taylor Swift es una de muchos cuyo trabajo ha sido amenazado por una compañía de capital privado. Ellos están engullendo más y más nuestra economía, costando trabajos y destruyendo industrias enteras. Es tiempo de detener a las compañías de capital privado – y yo tengo un plan para ello”.
La congresista Alexandria Ocasio-Cortez, por su parte, opinó que “Las prácticas predatorias de los grupos de patrimonio privado hieren activamente a millones de estadounidenses. Sus compras influencia han destruido la vida de trabajadores minoristas alrededor del país, llevando a la basura más de un millón de trabajos. Ahora están secuestrando la propia música de Taylor Swift. Necesitan ser detenidos”.
Otras personalidades como Gigi Hadid, Cara Delevingne, Hayley Kiyoko y Selena Gómez se han pronunciado a favor de Swift y su música.
