La cumbre de Varsovia sobre Oriente Medio mostró que Estados Unidos busca crear en Oriente Medio nuevas “líneas divisorias”, declaró la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova.
«Lamentablemente tenemos que constatar que la conferencia en Varsovia fue una nueva muestra del curso de la Administración estadounidense, que busca crear nuevas líneas divisorias en Oriente Medio, ya de por sí lleno de conflictos y discrepancias», expresó en un comunicado publicado en la página web del Ministerio de Exteriores.
Asimismo, Zajárova aseveró que el objetivo de la cumbre no fue debatir los problemas de Oriente Medio, sino «crear varios grupos temáticos de trabajo» que examinen los retos globales como el terrorismo, el flujo de refugiados, la no proliferación de las armas nucleares y las cuestiones humanitarias. En consecuencia, denunció que es un intento de elaborar otro plan para tomar «decisiones unilaterales».
Washington quiere influir en la política de Oriente Medio
Zajárova opinó que Washington trata de «lanzar y encabezar un proceso duradero para influir en la política de Oriente Medio de los Estados miembros de la conferencia de Varsovia, de manera que sea beneficiosa» para EE.UU.
Por ello, la diplomática llamó a la comunidad internacional a elaborar enfoques coordinados para resolver las crisis en Oriente Medio y África del Norte, al destacar que estas decisiones deben ser colectivas, tomadas bajo los auspicios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de conformidad con las normas del derecho internacional.
El portal Sputnik informó que la conferencia ministerial sobre Oriente Medio, promovida por EE.UU. y Polonia, se celebró del 13 al 14 de febrero. Incluso, puntualizó que Rusia no asistió al foro al calificarlo de politizado y desestabilizador para la región.