La expresidenta brasileña Dilma Rousseff denunció el martes que el actual presidente de su nación, Jair Bolsonaro, generó un vínculo de sometimiento con EE.UU. que menosprecia la soberanía de la nación.

“Con el ascenso del grupo que sostiene a Bolsonaro y de él mismo al Gobierno de Brasil lo que se ve es una alineación sumisa, en algunas características hasta de menosprecio de la condición de soberanía del país”, indicó Rousseff.

La expresidenta y dirigente del Partido de los Trabajadores (PT) reconoció que “es difícil decirlo, pero es así; que un jefe de Estado o alguien de alto rango se cuadre ante la bandera estadounidense es algo que nunca se había visto en Brasil, ni en los momentos de mayor alineamiento”.

 

Jair Bolsonaro, presidente de Brasil. / FOTO: Reuters

“La vuelta de esa sumisión”

En su alocución, la exmandataria subrayó que Bolsonaro modificó la tradición de política exterior de las últimas décadas impulsada por el PT.

“La vuelta de esa sumisión” del Poder Ejecutivo es “completamente contraria a toda tradición que Brasil venía desarrollando en los últimos tiempos”, sostuvo Rousseff.

Para la exmandataria de la nación, tanto su Gobierno como el de Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011) dejaron de dar la espalda a la región para priorizar la relación con los países latinoamericanos, con el impulso de “foros multilaterales, como la Unasur (Unión de Naciones Suramericanas) y la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños)”.

Sin embargo, Bolsonaro sostuvo al ganar las elecciones en 2018 que los bloques latinoamericanos no serían prioridad de su política exterior.