Si has cocinado alguna vez la salsa bechamel sabrás que lleva solo tres ingredientes prácticamente: mantequilla, harina y leche.
Pero, para esta versión vegana vas a utilizar aceite de oliva extra virgen en lugar de margarina u otras alternativas comerciales. Además, vas a emplear cualquier bebida vegetal a tu gusto pero tienes que tomar en cuenta que puede haber ligeras variaciones de color, sabor y textura.
En esta bechamel vegana vamos a utilizar una harina común de trigo y leche o bebida de soja, pero como te dijimos arriba puedes utilizar otros ingredientes. Se puede preparar también con harina de espelta o en su versión integral, y como alternativas sin gluten el almidón de maíz o la maizena es una buena opción e incluso harina de legumbres, con más proteínas.
Si deseas una bechamel espesa para hacer croquetas o algún relleno de más consistencia, tienes que aumentar proporcionalmente la cantidad de aceite y de harina. Sin embargo, si prefirieres una salsa más ligera, puedes añadir más bebida o usar incluso caldo de verduras.
¿Qué necesito para cocinar la bechamel vegana?
Estos ingredientes son para 4 personas.
- 50 g Aceite de oliva virgen extra.
- 50 g Harina de trigo.
- 600 ml Leche de soja u otra bebida vegetal.
- Nuez moscada al gusto.
- Pimienta negra al gusto.
- Sal al gusto.
¿Cómo hago la bechamel vegana?
Esta receta es bastante fácil, tiene un tiempo total de preparación de una hora y de cocción de 40 minutos.
Es importante que utilices una cazuela ancha o sartén de fondo grueso y antiadherente, para evitar que se queme y tener una superficie amplia de trabajo. Asimismo, es aconsejable emplear leche o bebida vegetal a temperatura ambiente.
Lo primero que vas a hacer es calentar el aceite de oliva a temperatura media-baja, sin dejar que humee, y le debes añadir la harina con cuidado.
Inmediatamente tienes que empezar a remover con una varilla o una cuchara de madera, para tostarla e incorporarla con el aceite, formando una pasta espesa -llamado roux-.
En ese momento hay que empezar a echar la bebida vegetal poco a poco, sin dejar de remover constantemente.
Debes mantener la cocción a potencia suave para que no se queme y no hierva. Además debes continuar echando líquido y removiendo constantemente, hasta que espese al gusto.
Seguidamente lo vas a apartar del fuego y le vas a añadir sal, pimienta negra -opcional- y nuez moscada recién rallada al gusto, siempre probando con cuidado para corregir el punto.
Si te ha quedado muy líquida puedes devolverla al fuego.
Finalmente hay que decir que la salsa bechamel vegana tiene multitud de aplicaciones, y no solo croquetas.
Puedes usarla para cocinar pasta o sus versiones vegetales -como una lasaña de calabacín-, o para hornear y gratinar verduras en el horno.