En Australia, se está estudiando la idea de acoger como refugiada a la joven saudí que huyó de los abusos de su familia y se encerró en un hotel en el aeropuerto de Bangkok.
La joven, había anunciado la intención de renunciar al Islam. Luego de ello, tuvo que permanecer en un lugar seguro de Tailandia.
Al respecto, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para Refugiados (ACNUR), solicito al país, que estudiara la opción para acoger a la joven afectada como refugiada. A sabiendas, de que huyó por apostatar del islam, una religión basada en el Corán.
ACNUR remitió el caso de la joven saudí a Australia
Rahaf Mohammed Al-Qunun tuvo una decisión bastante difícil, sin embargo, su caso fue remitido a Australia.
ACNUR ha remitido el caso de Rahaf Mohammed Al-Qunun a Australia para que considere su acogida como refugiada. El Ministerio del Interior considerará esta solicitud de la forma habitual, como hace con todas las propuestas de ACNUR
De acuerdo a declaraciones del ministerio del interior australiano.
Por otro lado, tanto el padre como el hermano de Rahaf, viajaron hasta Tailandia. Una vez allí, solicitaron una reunión con la saudí y ACNUR. Sin embargo, esta última instancia expresó una negativa debido a las amenazas de muerte propiciadas por los familiares.
Rahaf, aperturó una cuenta en la red social Twitter hace apenas algunos días. Desde entonces, ha empezado a compartir su historia, escribiendo y subiendo algunos vídeos. Su experiencia sea hecho viral, a tal punto de que en la actualidad cuenta con 111.000 seguidores.
Australia estudiará el caso mientras Al Qunun está atrincherada
Al Qunun ha denunciado en reiteradas oportunidades, que ha sido víctima de distintos abusos tanto emocionales como verbales y físicos. Dice que su vida corre peligro, y es por ello, que se ha atrincherado en un hotel para evitar la deportación desde Tailandia.
Mis hermanos, mi familia y la Embajada saudí me estarán esperando en Kuwait
Ha indicado la joven, quien dice a la agencia Reuters, que “la matarán”. Todo esto, en conjunto con las distintas amenazas de muerte por cosas muy triviales.
Según indica la joven, sus familiares no la dejan seguir con su educación. Tampoco le permiten viajar, ni hacer otras actividades, por lo que se siente aislada.
Arabia Saudí es un país bastante restrictivo. Sin embargo, tanto ACNUR como la Human Rights Watch (HRW) han indicado su preocupación, y también le han hecho hincapié en las obligaciones internacionales en lo que respecta al asilo y no devolución.