Este miércoles, cientos de estudiantes de Hong Kong se han movilizado en rechazo a los actos de represión vividos el pasado martes en el marco del Día Nacional de China, jornada en la que los agentes policiales hicieron uso de munición real e hirieron a un joven de 18 años.
La protesta pacífica constó primero de una sentada en una escuela secundaria con el fin de condenar la actuación policial contra el joven Tsang Chi-Kin, quien fue impactado por una bala en el pecho durante un enfrentamiento con los agentes policiales.
Luego, los manifestantes, algunos con máscaras de gas, llevaron sus manos al pecho como símbolo de protesta y desplegaron una pancarta en la que acusan a los policías de haber intentado asesinar al joven ciudadano.
Desde el colegio “Tsuen Wan Public Ho Chuen Yiu Memorial College”, más tarde, los compañeros que Tsang salieron marchando hasta un parque del distrito financiero Central, donde más personas se unieron para repudiar la violencia contra los manifestantes demócratas y la juventud, causando bloqueos en el tráfico de la excolonia británica.
Sin embargo, el jefe de la policía local, Stephen Lo, ha justificado el ataque con arma de fuego contra Tsang, pues la vida del agente policial habría corrido peligro en ese momento.
“Un agente abrió fuego para tratar de salir de una situación que amenazaba su vida o la de sus compañeros. Tomó la decisión en un breve lapso de tiempo. Creo que fue la decisión correcta en ese momento, es legal y razonable”, aseguró Lo en cuanto al incidente que presuntamente fue grabado.
De acuerdo al vídeo, una persona que supuestamente sería Tsang sí iba a agredir a un agente con una especie de palo. No obstante, el policía disparó contra el joven a quemarropa antes de que lo lograra. El material audiovisual habría sido difundido por redes sociales.
Aunque la herida fue comprometedora, debido a la ubicación de la bala a apenas tres centímetros del corazón, Tsang estaría actualmente estable. De acuerdo al Hospital Queen Elizabeth en declaraciones para EFE, Tsang continúa en tratamiento.
No obstante, el joven de 18 años no fue el único en ser herido durante los fuertes enfrentamientos que también contaron con el uso de gases lacrimógenos y balas de goma, pues según las autoridades sanitarias, al menos 104 personas vieron comprometida su integridad física por parte de los policías.
El gobierno de Hong Kong, igualmente, confirmó el arresto de 269 personas en la ciudad luego de que los manifestantes más radicales crearan barricadas y las prendieran en fuego, o lanzaran bombas molotov.
La protesta del lunes, la más violenta hasta ahora, se enmarcó en el Día Nacional de China, fiesta anual que celebra la fundación de la República Popular China y su sistema comunista.