¿Sabías que muchos creen que actualmente, por fin, estadounidenses está en una época de paz sin asesinatos en masa?
Hoy en Notiboom, hemos desarrollado una lista que no solo trata sobre algunos de los peores asesinatos en masa en la historia de EE.UU. sino que cada uno de estos sigue sin resolverse hasta el día de hoy.
Los asesinatos se llevaron a cabo por una variedad de razones aparentes, que van desde la codicia hasta la sed de sangre. No obstante, los verdaderos motivos de estos horribles crímenes nunca se conocerán, dado su carácter no resuelto.
1. La masacre de Blackfriars
Alrededor de las 2:00 am del 29 de junio de 1978, tres hombres armados ingresaron a un bar de Boston llamado “Blackfriars”.
Se sabía que el pub irlandés, que estaba ubicado en el centro de la ciudad, tenía una reputación bastante tosca. Cuentan que los miembros del inframundo de Boston frecuentaban “Blackfriars”.
Ahora bien, ese día varios hombres estaban en el sótano del bar ocupados jugando un juego de backgammon cuando fueron despedidos.
El gerente del bar John A. «Jack» Kelly, Charles Magarian, Peter Meroth, Freddie Delavega y Vincent Solmonte fueron fusilados varias veces por una escopeta de calibre 12 y una automática de calibre25, en lo que parecía ser un robo desaparecido incorrecto.
El caso de Jack Kelly hizo las cosas un poco interesantes. Kelly, ex periodista de investigación de WNAC-TV de Boston, fue despedido en noviembre de 1976 luego de realizar varias denuncias amenazadoras contra el alcalde Kevin White.
Se sabía que White se asociaba con pandilleros locales, incluido Solmonte, que le había dado a Kelly el trabajo en “Blackfriars” después de su despido en la estación de televisión.
La policía de Boston creía que la masacre pudo haber sido motivada por la mafia y dos mafiosos. Por ello, el narcotraficante William Ierardi y Robert Italiano, fueron arrestados y juzgados por el crimen antes de ser absueltos en 1979.
Ierardi era un conocido asociado de Stephen The Rifleman Flemmi, el segundo al mando de Winter Hill Gang y un amigo cercano de James “Whitey” Bulger.
Sin lugar a dudas, la masacre fue un asesinato de pandillas.
Sin embargo, nadie está seguro de si los perpetradores eran miembros de la familia del crimen Patriarca, la pandilla Bulger o algún otro grupo desconocido de delincuentes italiano o irlandés.
2. Los asesinos de la familia Dardeen
La ciudad de Ina, Illinois, fue sacudida por un homicidio cuádruple el 18 de noviembre de 1987.
El 19 de noviembre, la policía fue al remolque de Robert Keith Dardeen, de 29 años, quien no se había presentado al trabajo en el Rend Distrito de conservación de agua de lago.
Keith no solía faltar al trabajo, por lo que su supervisor primero llamó a los padres de Keith. Cuando no proporcionaron ninguna información sobre el paradero de Keith, se notificó a la policía.
Dentro del trailer, la policía encontró una verdadera casa de horror.
La esposa de Keith, Ruby Elaine Dardeen, de 30 años, fue encontrada muerta junto a su hijo de tres años, Peter.
Ambos habían sido golpeados hasta la muerte con un bate de béisbol que había sido un regalo de cumpleaños para Peter.
Más horroroso aún era el hecho de que Elaine había estado embarazada en el momento de su muerte.
El asesino o los asesinos habían golpeado a Elaine tan gravemente que se había puesto de parto a mitad del ataque. La niña recién nacida fue arrastrada al mundo y luego golpeada hasta la muerte.
El cuerpo de Keith no se encontraría hasta el día siguiente. Su cadáver, que fue encontrado en un campo cercano, mostró que Keith había recibido tres disparos. Su pene también había sido extirpado.
Dado el horror absoluto de la escena del crimen, los locales comenzaron a culpar a los satanistas por el crimen.
Otros sugirieron que los adictos a las drogas habían matado a la familia Dardeen para apoderarse de sus posesiones.
Durante un tiempo, los investigadores de Illinois sospecharon del asesino en serie Angel Maturino Resendiz, un pasajero de origen mexicano y residente en Texas que fue arrestado en 1999.
Otro asesino en serie en Texas, Tommy Lynn Sells, confesó el crimen en el 2000, pero a lo largo de los años, su historia repetidamente cambiada.
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3. Los asesinos de la tienda de yogurt
El 6 de diciembre de 1991, los bomberos en la ciudad capital de Austin, Texas, respondieron a un presunto incendio en un centro comercial.
El centro comercial, que estaba ubicado en el extremo noroeste de la ciudad, incluía una tienda de yogurt con el nombre ingenioso: “¡No puedo creer que sea yogurt!”.
Los bomberos lograron apagar el incendio, pero lo que encontraron en el interior necesitó de la Participación del Departamento de Policía de Austin.
Dentro de la tienda de yogurt estaban los cuerpos de cuatro mujeres jóvenes: Amy Ayers, de 13 años, Eliza Thomas, de 17, Jennifer Harbison, de 17, y su hermana, Sarah, de 15 años.
Todas las víctimas fueron encontradas desnudas, atadas y con heridas de bala en la cabeza. Tres de los cuerpos estaban apilados, y al menos una de las niñas había sido violada. Los otros tres estaban tan quemados que un examen más profundo era casi imposible.
El asesinato en la tienda de yogurt sigue atormentando a los ciudadanos. El cierre se acercó de manera tentadora cuando cuatro jóvenes fueron arrestados en Texas y Virginia Occidental en octubre de 1999.
Robert Bruce Springsteen, de veinticuatro años, y Michael James Scott, de 25 años, fueron los dos únicos en ir a juicio, y ambos hombres fueron condenados por pruebas de ADN endebles. En 2001, Springsteen fue condenado a muerte.
Cinco años después, el Tribunal de Apelaciones de Texas anuló la condena de Springsteen. Esto se debió en parte al caso del detective Héctor Polanco.
Luego de una prueba de ADN negativa en 2008, Springsteen y Scott fueron liberados en 2009.
4. Los asesinos de la calle LaSalle
El 1 de diciembre de 1971, se encontraron tres cadáveres en una casa ubicada en North LaSalle Street en Indianápolis.
La casa pertenecía a dos de las víctimas, Robert Gierse, de 34 años, y Robert Hinson, de 27 años. La tercera víctima fue identificada como James Barker, de 27 años.
Tras un examen detallado de la escena del crimen, la policía descubrió que cada víctima había sido golpeada en la cabeza con algún tipo de objeto contundente.
Las manos de las víctimas estaban atadas, y sus gargantas habían sido cortadas tan profundamente que casi todas habían sido decapitadas.
El asesino o los asesinos también habían dejado cada cadáver en habitaciones separadas.
El cuerpo de Hinson estaba ubicado en el dormitorio delantero, el de Giersé estaba ubicado en un dormitorio trasero y el cadáver de Barker se encontró en el baño que estaba entre las dos habitaciones.
Las tres víctimas trabajaron en la industria del microfilm.
Barker trabajó para la gran corporación Bell y Howell. Por un tiempo, Hinson y Gierse trabajaron para Records Security, una compañía con sede en Jasper, Indiana.
Antes de sus muertes, Hinson y Gierse se habían mudado a Indianápolis para comenzar su propia compañía de microfilm, llamada B&B Microfilm Services.
Barker vivía en algún lugar cercano en el momento de los asesinatos, pero se sabía que pasaba las noches con sus dos amigos cercanos en la casa de la calle LaSalle.
Algunos lugareños insinuaron que los hombres estaban conectados a la mafia y habían saqueado a clientes y equipos de la Seguridad de los Registros. Estos rumores proporcionaron a los investigadores su primera teoría principal.
El primer hombre sospechoso fue Ted Uland, el propietario de Records Security.
Uland había contratado una póliza de seguro de vida tanto para Gierse como para Hinson por valor de $150,000. Años después, en el 2000, la hija de un hombre llamado Fred Harbison dijo a los medios locales que su padre había escrito una confesión en el lecho de muerte afirmando haber cometido el triple homicidio como parte de un asesinato por contrato elaborado por Uland.
