Según los reportes, hasta el momento son 99 las personas fallecidas y 276 personas que aún no aparecen, las esperanzas de encontrar sobrevivientes son cada vez menores en una región que ha quedado destrozada. Son muchas las familias de Brasil que están viviendo una gran agonía, incluso algunas de ellas han optado por escarbar por si mismas en el lodo para buscar los restos de sus seres queridos.
Brumadinho sacudido por la tragedia
El barro se extiende por alrededor de 290 hectareas, tras el colapso de la minera Vale, 12,7 millones de m3 de residuos de lodo y minerales de hierro fueron expulsados llevándose todo a su paso. No solo personas, sino también viviendas enteras, vehículos, vegetación y mucho más.
Quienes han vivido la peor tragedia han sido los trabajadores de la empresa, quienes se encontraban en la central administrativa que fue totalmente tragada por el tsunami de barro.
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«Muchos amigos, muchos conocidos, estamos todos sacudidos. Esto no tendría que haber sucedido. Hubo mucha imprudencia. Hoy todo Brumadinho está de luto», dijo apenado Gustavo França, un agente inmobiliario de 25 años, mientras se dirigía hacia el velorio de un amigo al que acababan de encontrar.
Los entierros en Brumadinho son rápidos, el momento de la oración no suele durar más de 15 minutos ya que los cuerpos no resisten.
Rescatistas continúan buscando desaparecidos tras el colapso de una represa en Brumadinho
El nombre de Vale sobrevuela el asfixiante clima de barro, luto y calor que se vive en Minas Gerais. Se estima que podrían llegar a pasar días o incluso semanas hasta que los cuerpos de muchas otras personas sean encontrados en la profundidad del lodo. Los bomberos están trabajando con mucha precaución para no quedar atrapados.
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«No me gusta culpar a nadie, porque los accidentes son imprevisibles, pero creo que hay que buscar a los responsables de esto», fueron las palabras de Ana Olivia Jardim, una estudiante de 19 años, que aún no puede entender lo que le ha sucedido a su pueblo que sin duda ya no volverá a ser el mismo de antes.