En la repostería venezolana, la torta de auyama o calabaza es una de las favoritas gracias a su suave sabor y esponjosa textura.

Además de eso, la auyama o calabaza es un vegetal con una enorme variedad de beneficios que harán que comerla en un postre no sea una experiencia que te haga sentir culpa.

Al contrario, querrás incorporarla en tu dieta de forma seguida y es que la auyama contiene calcio, magnesio, zinc, sodio, hierro, potasio, vitaminas A, B y C, fibra soluble y betacaroteno… Además, es baja en calorías.

Es por eso que, en esta oportunidad, hemos traído una fácil receta para que puedas preparar esta delicia desde la comodidad de tu hogar y aproveches todas sus bondades en la dulce forma de un pastel.

Estos son los ingredientes que necesitarás para hacer una torta de auyama:
  • 3 kg de auyama
  • 2 tazas de azúcar (400 gramos)
  • 6 huevos
  • 1 taza de leche en polvo
  • 2 tazas de harina (280 gramos)
  • 250 gramos de mantequilla
  • 1 cucharadita de vainilla
  • 1 pizca de canela
Modo de preparación:
  1. Hierve la auyama y escúrrela. Una vez esté fría, tritúrala con un tenedor o pasapuré hasta conseguir una textura suave.
  2. En otro recipiente, mezcla la mantequilla con el azúcar y, poco a poco, agrega los huevos, la leche en polvo y la harina. Puedes utilizar una batidora para mezclar el producto, así como una varilla eléctrica o manual. Luego añade canela en polvo y esencia de vainilla al gusto.
  3. Añade la auyama triturada a la mezcla e intégrala hasta que quede lo más suave y homogénea posible.
  4. Vierte la mezcla en un molde engrasado y con harina para que no se pegue a los bordes y hornéala a temperatura media por unos 20 minutos o hasta que esté lista (para cerciorarte que tu torta ya terminó de prepararse, introduce un palillo al bizcocho; cuando salga limpio, significa que tu pastel ya está listo).
  5. Si así lo deseas, puedes añadir a tu torta un poco de merengue, chocolate o caramelo para darle ese plus que tanto gusta.

¡Y listo! Ya tienes una deliciosa torta de auyama para disfrutar en casa o en el trabajo como merienda.

Solo no olvides compartirla con tu familia y amigos. ¡La comida se disfruta más si estamos acompañados!

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