Este miércoles 23 de enero el ex presidente y dictador peruano Alberto Fujimori fue trasladado al Penal de Barbadillo donde inicialmente estaba recluido en 2007 tras ser enjuiciado y condenado a 25 años de prisión por delitos de Lesa Humanidad relacionados con las masacres de Barrio Alto y La Cantuta, así como otros actos cometidos bajo su régimen dictatorial durante su mandato entre 1990 y el 2000.
Fujimori se encontraba hospitalizado por graves problemas de salud desde octubre del pasado 2018.
La salud de Fujimori
Fujimori, ya con 80 años de edad, fue trasladado a la clínica Centenario Peruano Japonesa el pasado octubre, por presentar una delicada condición de salud que ponía en riesgo su vida tras sufrir una descompensación.
El ex presidente, fue internado en la clínica donde permaneció más de cien días continuos, hasta que la misma Junta Médica que dictaminó necesaria su reclusión, señalo que ya era apto para ser detenido nuevamente en el centro penitenciario.
Antes de otorgar el alta médica la Corte Suprema ordenó al Instituto Nacional Penitenciario de Perú (INPE), la elaboración de un informe para expresar que el penal cumple con los requisitos exigidos por la Junta Médica, para que el ex mandatario pueda continuar con el tratamiento médico al ser internado nuevamente.
Las exigencias presentadas fueron: Asegurar la administración de los medicamentos, otorgar controles médicos periódicos, y el traslado inmediato a un centro asistencial de salud si llegase a requerirlo tras cualquier síntoma alarmante.
El viernes 18 de enero la Corte Suprema de Perú emitió una resolución basada en las recomendaciones de la Junta Médica, determinó que el ex mandatario se encuentra estable y podía recibir un tratamiento de forma ambulatoria, por lo que podía regresar a la cárcel.
Regreso a prisión
Fuertemente custodiado en un vehículo oficial, Fujimori fue trasladado nuevamente al Penal Barbadillo este miércoles 23 de enero, será en este centro penitenciario donde termine de cumplir su condena que fue interrumpida el 24 de diciembre de 2017, cuando el presidente del Perú para ese momento Pablo Kuczinsky, le otorgó un indulto humanitario, el mismo fue anulado en octubre pasado por la Corte Suprema, luego que la Corte Interamericana de Derechos Humanos atendiera una petición por parte de los familiares de las víctimas y pidiera la revisión del indulto concedido, inmediatamente después, fue recluido Fujimori por problemas de salud en la clínica Centenario.
Frente a la clínica sabiendo de su pronta salida se apostaron algunas personas para apoyar al dictador con altavoces y gritando consignas a su favor, reclamando su libertad, por su parte en una carta difundida en la red social Twitter Fujimori expresó: “Tengo casi 12 años preso y hoy me están llevando de nuevo a la cárcel. ¿No es eso suficiente?».
Las autoridades penitenciarias previniendo cualquier problema médico han acondicionado un espacio con mobiliario médico necesario y se mantendrán vigilantes, los informes médicos de alta resumen que Fujimori padece depresión e hipertensión arterial, en los antecedentes se reflejan seis intervenciones quirúrgicas por lesiones cancerígenas en la lengua.
