El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, indicó que espera que su país llegue a un acuerdo para evitar que EE.UU. imponga aranceles a los productos mexicanos, pero aseguró que, si no hay un entendimiento, su Gobierno está analizando todas las opciones para responder a los gravámenes.
Las conversaciones proseguirán en Washington después que funcionarios de ambos países se reunieron en la víspera para dejar atrás las desavenencias pero no hubo fumata blanca.
“Esperemos que el día de hoy se logre un acuerdo (…) y no se apliquen estas medidas unilaterales a partir del lunes”, dijo López Obrador, conocido por su acrónimo AMLO, durante su habitual rueda de prensa matutina.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, prometió la semana pasada que impondrá aranceles de un 5% a todos los bienes provenientes de México, los que irán subiendo hasta que cese el flujo de inmigrantes ilegales hacia su país. Las medidas se harían efectivas el lunes.
México parecía comprometerse con las exigencias de EE.UU. luego que anunció el reforzamiento de la seguridad en su frontera con Guatemala -por donde cruzan la mayoría de migrantes-, aprehendió a uno de los principales organizadores de las caravanas y bloqueó varias cuentas bancarias presuntamente relacionadas con el tráfico ilegal de migrantes.
Además, durante las negociaciones, México se ofreció a enviar 6.000 efectivos de la Guardia Nacional a su frontera con Guatemala para frenar el flujo de migrantes, dijeron al portal Reuters dos personas con conocimiento del asunto.
Sin embargo, el portavoz de la Secretaría de Gobernación mexicana, Héctor Gandini, negó el ofrecimiento. “Es falso, hasta ahora no se está discutiendo”, puntualizó a Reuters.
Si las tarifas se materializan, analistas esperan que la economía mexicana -la segunda más grande de Latinoamérica- entre en recesión. Incluso, las amenazas ya golpearon con fuerza a los mercados locales.
Más tarde, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, aseguró que se habían logrado avances en las negociaciones durante la mañana del jueves, pero que continuarán por la tarde.
“No hemos terminado. Creo que estamos avanzando”, destacó Ebrard a periodistas tras salir de la junta.
Por otro lado, el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, quien encabezó la ronda inicial de negociaciones en Washington del miércoles, aseguró que las pláticas fueron positivas, pero enfatizó que la administración de Trump aún quiere que México se comprometa a trabajar más para combatir la inmigración ilegal.
“Dimos la bienvenida a los esfuerzos de los funcionarios mexicanos para ofrecer soluciones a la crisis en nuestra frontera sur, pero necesitamos que México haga más”, aseveró Pence el jueves.
Las declaraciones de Pence coincidieron con las de Trump, quien, antes de abandonar Irlanda rumbo a Francia para asistir a las celebraciones por el aniversario del “Día D”, insistió en que su vecino debe “intensificar” sus esfuerzos por detener a más migrantes o se terminarían aplicando las tarifas.
Reforzar medidas de seguridad
El miércoles, EE.UU. manifestó que en mayo el número de personas detenidas en su frontera con México alcanzó su máximo mensual en más de una década.
México ha dicho que la imposición de aranceles sería devastadora para su economía y que se le complicaría contener el flujo migratorio por el impacto económico que tendrían.
El gobierno de López Obrador aseguró recientemente que cada vez está deteniendo a más migrantes y ha insistido en que la solución a la migración es el desarrollo de El Salvador, Guatemala y Honduras, así como el sur de México.
Más aun, el miércoles, autoridades frenaron a un nuevo grupo de más de 500 migrantes que ingresaron por la frontera con Guatemala.
“Lo que queremos es que la gente entre ordenada, no irrumpa en nuestro país”, dijo el jueves la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez.
“Tenemos nuestra soberanía, nuestras leyes, nadie puede violentar nuestras leyes (…) de una forma como lo estaban haciendo (los migrantes centroamericanos), en algunos casos, de manera agresiva”, agregó la funcionaria antes de afirmar que México reforzará las medidas de seguridad en su frontera sur.
Más tarde, la Secretaría de Economía anunció el bloqueo de decenas de cuentas bancarias de personas y empresas que presuntamente han participado en el tráfico de migrantes y la organización ilegal de caravanas.
De otro lado, la Fiscalía General anunció la detención de dos de los principales organizadores de las caravanas de migrantes que han causado la ira de Trump, por la probable comisión del delito de transporte de migrantes. Los mexicanos Irineo Mujica y Cristóbal Sánchez fueron detenidos el miércoles.
“A cambio de obtener diversas cantidades de dinero les prometieron internarse ilegalmente en el país para llevarlos a la frontera norte de México, con objeto de introducirse ilegalmente a los Estados Unidos”, indicó la Fiscalía mexicana.
