El expresidente brasileño, Luiz Inácio “Lula” da Silva, quien recientemente fue liberado de prisión tras haber estado encarcelado por más de un año, dijo en entrevista para The Guardian que el expresidente Evo Morales cometió un error al haber buscado un cuarto mandato en Bolivia.

“Mi amigo Evo cometió un error cuando buscó un cuarto mandato como presidente”, dijo da Silva, quien además denunció ante el medio inglés que “lo que hicieron con [Morales] fue un crimen y un golpe de Estado”.

Evo Morales, quien gobernó Bolivia por casi 14 años, renunció a su cargo como presidente de Bolivia tras varias semanas de protestas debido a sospechas de fraude en los últimos comicios electorales.

Y es que, de acuerdo a los resultados oficiales, Morales habría sido electo con apenas los votos necesarios para evitar la segunda vuelta. Sin embargo, los datos de transmisión preliminar, los cuales fueron cancelados el mismo domingo 20 de octubre, indicaban que la segunda vuelta era inminente, a pesar de la clara ventaja de Morales ante el opositor Carlos Mesa.

Evo Morales (REUTERS/Carlos Jasso)
Evo Morales (REUTERS/Carlos Jasso)

Actualmente, Morales se encuentra asilado en México, mientras que el país andino se encuentra en manos de Jeanine Áñez, quien ascendió al poder luego de que el vicepresidente de Bolivia, el presidente de la cámara de senadores y la primera vicepresidenta del Senado renunciaran a sus puestos.

Sin embargo, hay sectores de la sociedad boliviana que consideran que Morales sigue siendo el presidente y que Áñez se autoproclamó en un Congreso sin quórum.

Lula da Silva, de 74 años de edad, llegó a la presidencia de Brasil en el año 2003 y fue uno de los primeros presidentes de izquierda de la región tras la llegada de Hugo Chávez en Venezuela en el año 1998.

Lula da Silva (REUTERS/Adriano Machado)
Lula da Silva (REUTERS/Adriano Machado)

Da Silva cumplió dos mandatos presidenciales y salió del poder en el año 2011. No obstante, el líder del Partido de los Trabajadores (PT) aspiraba a volver a postularse para la presidencia, candidatura que no pudo cumplir por haber sido encarcelado por cargos de presunta corrupción pasiva y lavado de activos.

En este sentido, Da Silva aseguró que no tiene pensado postularse para unos próximos comicios en Brasil, pues primero debería ser anulada su sentencia para optar por un cargo público, lo que no podría hacer hasta el 2022, año en el que llegará a los 77 años.

“La Iglesia Católica, con 2.000 años de experiencia, jubila a sus obispos a los 75 años”, explicó el exmandatario.

Tras su liberación, no obstante, Da Silva sí instó al Partido de los Trabajadores a reconquistar el poder en Brasil, que actualmente se encuentra en manos del polémico ultraderechista Jair Bolsonaro.

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