Este lunes primero de abril Claude Moraes, eurodiputado británico y presidente de la comisión parlamentaria de Libertades Civiles (LIBE) fue el primer político británico que ha sido apartado de un rol en Bruselas directamente a consecuencia del Brexit.
Moraes era el negociador del Parlamento Europeo en lo que se refería a la regulación sobre visados tras una salida sin acuerdo, y debía llegar a un punto en común con el Consejo, que representa a los Estados miembros, y con la Comisión Europea, según información publicada por El Confidencial.
Asimismo, informó que el primer borrador de la nueva regulación, elaborado por el Ejecutivo comunitario, no presentó ningún inconveniente ni para Moraes ni para la comisión LIBE, que lo aprobó. “Pero ese mismo texto, cuando llegó a manos del Consejo de la UE, sufrió una modificación. España, con el apoyo francés y después de presiones del embajador británico, logró que se introdujera un pie de página en el que se calificaba a Gibraltar como “colonia””, explicó el portal.
Fila de entrada en Gibraltar/ FOTO: EFE
Bloqueo indefinido
No obstante, con la negativa a Moraes a aceptar dicha calificación hay que señalar que, para que una regulación salga debe estar aceptada por las tres partes. En relación, la Comisión Europea había aceptado que se introdujera el pie de página, y el resto de países habían apoyado de forma unánime la petición del representante español durante las reuniones, pero el eurodiputado británico, de repente en el centro de todo el proceso, se negó.
El pie de página reza que “Gibraltar es una colonia de la corona británica” y que “hay controversia entre España y el Reino Unido respecto a la soberanía sobre Gibraltar […] cuya solución debe alcanzarse a la luz de las resoluciones y decisiones de la Asamblea General” de la ONU.
Ahora bien, Moraes indicó que la inclusión de la referencia al Peñón es totalmente arbitrario, y como señaló que el primer borrador de la Comisión Europea no incluía ningún tipo de especificación sobre la situación de Gibraltar. En consecuencia, el británico propuso un texto alternativo. “Este reglamento – de visados- se entiende sin perjuicio de la posición legal del Reino de España respecto a la soberanía sobre el territorio de Gibraltar”, rezaba la alternativa propuesta por Moraes y que fue rechazada por las capitales.
Más aun, en una reunión extraordinaria celebrada este lunes, han decidido quitar el dossier de las manos de Moraes y entregárselo al vicepresidente de la comisión, el búlgaro socialista Sergéi Stánishev.