El cierre parcial del gobierno de los Estados Unidos encara su segundo mes, y recientemente aparecieron los primeros signos que podrían llevar a una solución.
Desde 1976 se han vivido en el país 21 cierres de la administración pública, y éste, luego del de Bill Clinton (1995-1996) ha sido el más largo de todos provocando profundas consecuencias.
El 25% de los empleados públicos de los Estados Unidos no están cobrando su sueldo, muchos puestos de trabajo han cerrado, pero otros debido a la importancia de sus puestos deben continuar asistiendo a trabajar sin recibir compensación alguna.
La situación es grave y durante semanas las partes parecieron no estar dispuestas a ceder, mostrando así la gran polarización que afecta actualmente al país. Ayer, por primera vez se abrió la puerta a lo que podría llegar a ser un fin para el cierre del gobierno, se trata de un acuerdo bipartidista que será votado en el Senado el día jueves.
¿Se aproxima finalmente el fin del cierre del gobierno en los Estados Unidos?
Trump sin dar brazo a torcer con lo que fue la causa del cierre del gobierno, insiste en la creación del muro y busca responsabilizar a los demócratas de la mala situación que está viviendo la economía del país. El sábado presentó una nueva propuesta con la cual los Dreamers se veían beneficiados con tres años de protección, pero dentro de la propuesta estaba incluido el presupuesto para el muro, por lo cual los demócratas no dudaron en rechazarla.
Lo que parecía ser otro intento fallido, finalmente parece ser la base del acuerdo que pondría fin a este interminable cierre del gobierno.
Muchas empresas se han visto afectadas por esta decisión de paralizar a la administración pública, Standard & Poor’s informó una pérdida de US$ 1.200 millones. En caso que el cierre del gobierno continúe y no se llegara a una solución, las pérdidas podrían superar el presupuesto pedido por Trump para el muro.
Una grave situación en Estados Unidos tras el cierre del gobierno
El 55% de la población ve a Trump como culpable del cierre, mientras que un 32% culpa a los demócratas, pero lo cierto que la crisis ha afectado a ambas partes. De llevarse a cabo el acuerdo, la situación en la administración podría normalizarse, pero los efectos provocados seguirán presentes por un tiempo más y demuestran la difícil convivencia entre la Casa Blanca y la Cámara de Representantes, conformada en su mayoría por demócratas.