Corea del Norte aseguró este lunes, 09 de agostó, que estaba dispuesto a reiniciar las conversaciones nucleares con EE.UU. a fines de septiembre, pero advirtió que las posibilidades de un acuerdo podrían terminar a menos que Washington adopte un nuevo enfoque.
Kim Jong-Un, líder norcoreano, acordó en una reunión del 30 de junio con el mandatario estadounidense, Donald Trump, reabrir las conversaciones a nivel laboral desde su fallida cumbre de febrero en Hanoi. Sin embargo, esto aún no ha sucedido a pesar de los repetidos llamamientos de Washington.
El viceministro de Relaciones Exteriores de Corea del Norte, Choe Son Hui, señaló que Pyongyang estaba dispuesto a tener “discusiones exhaustivas” con EE.UU. a fines de septiembre en un momento y lugar acordado entre ambas partes; en una declaración realizada a la agencia de noticias oficial KCNA de Corea del Norte.
Sin embargo, una portavoz del Departamento de Estado de los EE.UU. dijo: “No tenemos reuniones para anunciar en este momento”.
Por su parte, el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, manifestó que esperaba volver a las conversaciones de desnuclearización con Corea del Norte en los próximos días o semanas.
En relación, Choe advirtió que Washington necesitaba presentar un nuevo enfoque o que las conversaciones podrían desmoronarse nuevamente.
Quiero creer que la parte estadounidense ofrecería una alternativa basada en un método de cálculo que sirva a los intereses de ambas partes y que sea aceptable para nosotros (…) Si la parte estadounidense juega con un viejo escenario que no tiene nada que ver con el nuevo método en las conversaciones a nivel de trabajo que se celebrarían después de las dificultades, un acuerdo entre las dos partes puede llegar a su fin, dijo Choe.
Una fecha límite
En abril, Kim fijó una fecha límite de fin de año para que EE.UU. muestre más flexibilidad en las conversaciones que se desmoronaron en febrero debido a las demandas estadounidenses de que Corea del Norte renuncie a todas sus armas nucleares y las demandas de Pyongyang para el alivio de las sanciones.
El plazo de finales de septiembre coincidiría con la Asamblea General anual de las Naciones Unidas en Nueva York, a la que Pompeo asistirá. No obstante, la semana pasada se comunicó que el ministro de Relaciones Exteriores, Ri Yong Ho, no asistiría “debido a su agenda”.
Corea del Norte exigió que Pompeo sea reemplazado por una persona “más madura” en el equipo de negociación de los EE.UU., al tiempo que elogia la relación establecida entre Kim y Trump en tres reuniones desde junio del año 2018.