Comúnmente las personas, tenemos nuestros armarios repletos de prendas de vestir que hemos dejado de usar por diversas razones. Sentimos que pasaron de moda, hemos subido o bajado de peso y ya no nos quedan. También pueden ser regalos o prendas que compramos pero ya luego no nos gustaron los colores o diseños. O que están deterioradas, rotas o manchadas.
Son prendas que dejamos guardadas “por si acaso” y no nos terminamos de decidir por tirarlas a la basura. Así que las dejamos arrumadas en un rincón “por si acaso vuelven a estar de moda”, “por si acaso nos quedan de nuevo”. Incluso las tenemos “por si acaso las podemos regalar a alguien más” o “por si acaso luego la remiendo o la arreglo”.
La realidad es que pueden pasar años sin que vuelvas a tocar esa ropa, que termina deteriorándose con el paso del tiempo y el polvo. Y seguramente te la pasas comprando ropa nueva porque “¡no tienes nada bueno que ponerte!”. Pues ya no tendrás que seguir gastando más dinero en prendas nuevas y dejar que se desperdicie toda la ropa que tienes guardada.
¿Cómo puedo aprovechar al máximo la ropa que ya no uso?
Transformar tu ropa usada en una prenda de moda, no es tarea difícil ni costosa. Solo necesitas tener imaginación creativa, tener claro qué deseas lograr y de cuáles materiales dispones para hacerlo. Tendrás prendas de vestir únicas e inigualables, porque serán diseños exclusivos hechos por ti. No existirá más nadie con algo igual.
En primer lugar, si tienes una prenda manchada o curtida, o de algún color que te desagrade, lo más fácil que puedes hacer es teñirla. Para ello debes leer la etiqueta con las especificaciones de la prenda, para no dañarla. Puedes hacerlo con alguna tintura natural o química especial para telas, del color que elijas.
¿Necesito saber de costura?
¡Para nada! En caso de que una prenda te quede grande, porque no es de tu talla, puede ser que solo baste que la cosas un poco a mano en algunas áreas específicas. No obstante, también puedes colocarle cintas o ligas según convenga y se vea mejor.
Seguramente pensarás que si una prenda te queda pequeña, está todo perdido y ya no tiene remedio alguno. ¡Pues no es así! Puedes agregar encaje, o retazos de tela decorativa para ampliarla. Pero eso no es todo, ¡Puedes transformar su diseño!
Y este es otro de nuestros puntos más importantes, porque una misma prenda puede tener múltiples usos. Es así como un pantalón se puede convertir en un short, una bermuda o una falda. Una camisa amarrada a la cintura, o un sweater se pueden transformar en un vestido. O una minifalda convertirse en un top.
¡Decora y confunde!
Otra técnica infalible para renovar tu ropa, es decorarla de forma que cambie su estilo por completo. Puedes ponerle cadenas, lentejuelas, encajes, dibujos, parches. Así nadie notará que se trata de la misma prenda que has usado siempre o dejaste de usar años atrás. ¡Son muchas las posibilidades! Solo debes dejar volar tu imaginación.