Michelle Bachelet, la jefa de derechos humanos de la ONU, señaló este miércoles que las fuerzas de seguridad venezolanas, respaldadas por milicias progubernamentales, han reprimido la disidencia pacífica con uso excesivo de la fuerza, muertes y torturas que han sido documentadas por su oficina.
En una comparecencia ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Bachelet también expresó su preocupación porque las recientes sanciones de EE.UU. a las transferencias financieras vinculadas a la venta de petróleo venezolano “puedan contribuir a agravar la crisis económica”.
Las autoridades venezolanas no han reconocido el alcance y la gravedad de la crisis sanitaria y alimentaria que ha llevado a más de 3 millones de venezolanos a huir al extranjero y han adoptado medidas “insuficientes”, dijo en el foro de Ginebra.
La alta comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas, Michelle Bachelet, durante una sesión del Consejo de DDHH de la ONU en Ginebra, Suiza. 6 marzo 2019/ FOTO: REUTERS/Denis Balibouse
Bachelet pide a Maduro que garantice labor de misión de la ONU en Venezuela
Bachelet, pidió hoy al Gobierno de Venezuela que garantice a los expertos de su oficina que actualmente están en ese país el acceso a los lugares y personas que elijan, sin represalias contra los entrevistados.
“Un equipo técnico de mi Oficina se encuentra actualmente en el país y considero que ésta es una primera medida positiva”, destacó Bachelet al tiempo que señaló que “es esencial que el equipo tenga acceso total y sin restricciones”.
Asimismo Bachelet informó al Consejo de las novedades que en materia de derechos humanos se han dado en Venezuela durante el último año, periodo en el que según la ex presidenta chilena continúa habiendo una grave crisis que “constituye además un inquietante factor de desestabilización regional”.
“Desde junio de 2018, el ejercicio de los derechos sociales y económicos ha seguido deteriorándose continuamente”, subrayó Bachelet, quien destacó que las autoridades venezolanas “se han negado a reconocer las dimensiones y la gravedad de la crisis en materia de cuidados médicos, alimentación y servicios básicos”.
En lo social, Bachelet dijo que los recientes apagones en Venezuela “simbolizan los problemas de infraestructura que afronta el país”, donde un millón de niños han dejado de ir a la escuela por problemas económicos de familias y escuelas o por la simple falta de docentes, muchos de los cuales han emigrado a otros países.
“La polarización está agravando una situación ya de por si crítica”, concluyó la alta comisionada, quien destacó que “es preciso que se alcance un acuerdo para una solución política”.