La noche entre el lunes y el martes, un adolescente de 14 años asesinó con un arma de fuego a los cinco miembros de su familia en el estado sureño de Alabama, de acuerdo con información de la policía local.

Según la oficina del sheriff del condado de Limestone, en la frontera con Tennessee, al sur de Nashville, el joven admitió “haber disparado contra los cinco miembros de su familia en su hogar” luego de haber llamado a la policía.

“Actualmente ayuda a los investigadores a ubicar el arma, una pistola de calibre 9mm que dice haber lanzado en las cercanías”, detalló la policía.

No está claro dónde o cómo el joven obtuvo el arma, ni cuál es el móvil que llevó a acabar con la vida de sus familiares.

En un primer reporte, las autoridades de seguridad habían confirmado la muerte de tres personas en la escena del crimen, mientras que las otras dos fallecieron en el hospital al sucumbir a las heridas.

Las víctimas del asesinato serían el padre, la madrastra y los hermanos del adolescente, quien en un principio había afirmado estar en el piso inferior de la casa cuando escuchó los disparos venir desde el piso superior.

El asesinato de los cincos miembros de la familia de seis en el estado de Alabama ocurre en medio de tensiones por la crisis de ataques con arma de fuego en Estados Unidos.

Apenas el fin de semana pasado, siete personas fueron asesinadas, mientras que 22 resultaron heridas, incluyendo un niño pequeño, en el estado de Texas.

En esta misma entidad sureña, en la ciudad de El Paso, el pasado mes un hombre acabó con la vida de 22 personas, e hirió a otras 24, en un ataque motivado por el odio que esta persona sentía hacia los mexicanos y la “invasión hispánica” de Texas.

Un día después, en Dayton, Ohio, otro atacante mató a nueve personas e hirió a otras 27.

De acuerdo al presidente republicano, Donald Trump, el chequeo de los antecedentes de los compradores de armas no serviría como prevención a este tipo de delitos.

Hasta la fecha, en Estados Unidos, ha habido más de 37.6620 incidentes con armas de fuego, en los cuales más de 9.930 personas han muerto, mientras que unas 19.968 personas han resultado heridas.

En cuanto a asesinatos en masa con armas de fuego, unos 283 ataques de este tipo han ocurrido en el país norteamericano, de acuerdo al Gun Violence Archive, grupo de investigación de violencia que recoge este tipo de datos.

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