Este domingo, el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, aseguró que se ha aumentado la vigilancia de 74 terroristas que salieron de prisión antes de cumplir la totalidad de sus condenas, tras el atentado con arma blanca del pasado viernes en el Puente de Londres.
“Dimos ese paso inmediatamente [tras el ataque]”, dijo Johnson en una entrevista con la BBC, en la que también criticó a las leyes del “antiguo régimen laborista” que permiten que los condenados por terrorismo salgan de la cárcel de forma automática una vez haya transcurrido la mitad del tiempo al que fueron sentenciados.
“Creo que hay un problema con esa liberación automática. Creo que está mal que se aplique a criminales sexuales, a delincuentes violentos y a terroristas”, dijo Johnson.
“La razón por la que este asesino estaba en la calle es por la liberación automática que aprobó un gobierno izquierdista”, agregó el político conservador, quien enfatizó en su programa electoral para los próximos comicios generales del 12 de diciembre, el cual busca endurecer las penas para quienes hayan cometido crímenes de gravedad.
Usmar Khan fue el responsable del atentado terrorista del Puente de Londres que dejó a dos personas fallecidas y otras tres con lesiones.
Khan, quien tenía 28 años de edad, había sido liberado en diciembre de 2018 luego de cumplir la mitad de sus 16 años de sentencia por haber formado parte de un grupo terrorista inspirado en Al Qaeda que estaba preparando un mega atentado semanas previas a las Navidades del 2010.
Este mega atentado tenía como objetivos el edificio de la Bolsa de Valores de Londres, el Big Ben, la abadía de Westminster, la embajada de los Estados Unidos en Londres, y la casa de Boris Johnson, quien entonces era el Alcalde de la ciudad capitalina.
Para el ataque del viernes, sin embargo, Khan trabajaba como combatiente del Estado Islámico (EI), de acuerdo a la consultora especializada en terrorismo yihadista SITE, la cual, asimismo, reprodujo un mensaje de la agencia Amaq, que tiene vínculos con el Daesh.
Según el comunicado obtenido por SITE, el Estado Islámico realizó el ataque “en respuesta a los llamamientos de atacar a los ciudadanos de la coalición [internacional]” por parte de gobiernos de occidentes que son liderados por Estados Unidos, país que lucha contra el EI y que acabó con la vida de su fundador y líder, Abu Bakr al Bagdadi.