La prevención del cáncer es un tema de vital importancia hoy en día, sin importar el sexo ni la edad de las personas.
El cáncer se manifiesta de distintas formas y sus causas varían, por tal razón se necesita hacer todo lo posible para reducir el riesgo de desarrollarlo, pero a veces simplemente sucede.
Una buena alimentación es fundamental para la prevención del cáncer.
Sin embargo, nunca se habla del papel que pueden desempeñar las bebidas en la salud, dado que ciertas bebidas pueden aumentar el riesgo padecer de cáncer.
1. Agua embotellada
En primer lugar el agua embotellada puede provenir de una fuente municipal, sin importar cuán bonita sea la imagen de un arroyo de montaña en la etiqueta.
Pero el elemento más dañino del agua embotellada es la propia botella. El plástico desechado no solo es un desastre ambiental, sino que también filtra sustancias químicas peligrosas en todo lo que toca.
Un ejemplo notable es el bisfenol-A o BPA. Este químico se usa en muchas botellas plásticas de agua a pesar de que es un conocido disruptor hormonal que aumenta el riesgo de cáncer de próstata y de mama, así como trastornos metabólicos.
2. Alcohol
Beber en exceso tiene una serie de consecuencias para la salud, una de las cuales es el cáncer.
Numerosos estudios señalan la relación entre el alcohol y los cánceres de esófago, estómago, hígado, colon y mama.
Y aunque muchos consideran que el vino tinto es saludable debido a su contenido de antioxidantes, todavía contiene etanol.
El etanol es el desencadenante principal para el cáncer que se encuentra en las bebidas alcohólicas. El CDC recomienda no más de una bebida por día si eres mujer y dos bebidas por día si eres hombre.
3. Bebidas energéticas
Las bebidas energéticas pueden hacer que te sientas invencible por algunas horas, pero están causando un daño constante dentro de tu cuerpo.
Por un lado, están hechos principalmente de azúcar, cafeína y colorantes artificiales, que pueden aumentar su presión arterial y azúcar en la sangre al mismo tiempo.
Las personas han muerto por beber demasiadas bebidas energéticas, especialmente por problemas cardíacos y convulsiones.
Cualquier cosa que debilite los sistemas dentro de su cuerpo puede dejar la puerta abierta para el cáncer. Además, el azúcar es el alimento favorito del cáncer y demasiadas bebidas energéticas dejan una gran cantidad disponible para alimentar esas células asesinas.
4. Soda de dieta
La soda de dieta tiene poco o nada de azúcar “real”, pero en cambio contiene un sustituto del azúcar como la sucralosa, la sacarina o el aspartamo.
Se sabe que estos azúcares falsos interfieren con los procesos metabólicos de su cuerpo, hacen que se almacene más grasa y potencialmente conducen a la diabetes y enfermedades del corazón. También están relacionados con cánceres de vejiga y tracto urinario completo.