La mujeres venezolanas terminan en manos de traficantes de personas huyendo de la crisis de Venezuela, según informó la agencia de noticias Reuters este jueves. Además, revelaron que las redes de trata de blancas en Perú tienen como su objetivo principal captar a migrantes venezolanas.
Esta inclinación por las criollas se debe a que la mayoría entran a su país sin portar documentos de identificación y urgidas de dinero, por lo que se han vuelto las presas más fáciles de capturar. Igualmente, muchas otras que ingresan legalmente y con mayor poder adquisitivo, terminan siendo vulnerables al no estar en su territorio ni contar con compañía que se preocupe por su desaparición física.
El grupo experto en la lucha contra la esclavitud que citó el portal, aseguró luego de consumar un análisis sobe el hecho, que una de cada diez venezolanas que huyen tienen el riesgo de caer en uno de estos tejidos de prostitución.
Asimismo, el organismo señaló que en un primer momento Colombia fue el epicentro de este «reclutamiento», sin embargo, cuando el éxodo alcanzó altos niveles en Perú, este se convirtió en tierra fértil para los traficantes.
«Muchas personas que llegan al país lo hacen sin documentos; no son capaces de identificarse como ciudadanos, y para el colmo de males, llegan muchachos y muchachas sin acompañantes, los que pueden ser fácilmente reclutados», así lo evidenciaron.
Índice de venezolanas víctimas de trata de blancas en Perú
José Iván Dávalos, jefe de la Misión de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), indicó que desde mediados de 2017 y parte del 2018, los cuerpos de seguridad de Perú registraron más de 1700 víctimas de tráfico humano, de las cuales el 10% son procedentes de Venezuela.
«Esta problemática podría empeorar debido a la condición vulnerable en que esta población de migrantes ingresa al país», así lo explicó Dávalos, durante su elocución en un evento que lucha contra la tarta de personas celebrado en Lima.
¿Cómo está el problema de la trata de blancas en Perú?
Según el experto, en el país se reportan al menos dos víctimas de redes de prostitución por día. Siendo las jóvenes y mujeres preadultas pobres más propensas a ser raptadas para la explotación sexual, puesto que son seducidas con propuestas de viajes falsas o trabajos bien pagados en ejercicios como camarería, bailarinas o cocineras; propuestas esenciales en el desarrollo de enganche.
Igualmente, existen unas zonas dentro del país como la selva amazónica, conocida como «Madre de Dios», en las cuales debido a la explotación de minerales existen una infinidad de clubes nocturnos que son utilizados como prostíbulos. Desde este espacio geográfico, en el pasado, funcionarios de seguridad han realizado operativos de rescate de víctimas.
Al respecto, un efectivo del Ministerio del Interior de Perú, Alejandro Delgado, afirmó que combatir este «negocio» requiere de grandes esfuerzos de los distintos cuerpos de seguridad nacional en conjunto con las fuerzas de países vecinos, puesto que algunas redes llegan a ser realmente grandes abarcando otras naciones.
«Es un fenómeno que no podemos tolerar. No podemos permitir que traten a esas personas, mujeres y niñas principalmente, como si fueran objetos. Es inhumano», dijo.
