¡Oye, mujer! Si, tú. Hola. Ya que te asomaste a ver este artículo, es mejor que lo leas hasta el final. Seguro te sonrojarás, te sentirás identificadas con algunas cosas y de algunas no tendrás conocimiento. Pero se trata de aprender y superarte.
Para empezar, debemos aclarar que más allá de ser un tema tabú, la vergüenza a masturbarte está fuertemente arraigado a un factor cultural que limita – en gran medida – el conocimiento sobre tu cuerpo, tus deseos y hasta capacidad para poder explicar lo que quieres.
La masturbación es normal, no es exclusiva de la especie humana, ni puede ser encasillado a una edad, clase social o a un estilo de vida específico. Hablar de este tema, no debería ser un problema, aunque si aún no sientes la seguridad para que sea un tema de conversación, tampoco es obligación. No obstante, no pierdas la oportunidad de conocerte a ti misma y sentirte cómoda con eso.
Pasé por lo mismo que tú
La cultura machista hace estragos con la aptitud de una mujer en aras de reconocerse a sí misma.
Partiendo de las situaciones más comunes, desde muy pequeña, los comentarios de las madres van en función a lo sagrado del pudor, el ocultamiento y la pasividad de tu sexualidad como un “asunto correcto”. Por lo que creces teniendo cierta aversión a mirar tu propia vagina y mucho menos a tocarla.
En los casos medianamente favorables, se te niega el acceso a esos temas e inculca la abstinencia hasta que tengas “esa edad”. Una vez alcanzada la edad, poco sabes sobre el tema, lo que te traerá problemas con tu pareja.
En los mejores casos, existe la intención de hablar sobre sexualidad, pero tu familia no siempre se tiene las herramientas para hacerlo correctamente. El enfoque de sexo seguro es el más común. Esto es con la intención evitar embarazos no deseados o la transmisión de enfermedades venéreas, pero, ¿quién te enseña a disfrutar del sexo de forma sana y plena?
Como resultado, en la adultez puedes terminar acuñando la responsabilidad de tu satisfacción a un estereotipo de pareja, cuando la responsabilidad es completamente nuestra.
Beneficios de la masturbación femenina
Conocerás tu vagina a profundidad
No hablo de una clase magistral llena de conceptos y nombres difíciles, me refiero a que sabrás como hacer para llegar a un orgasmo fantástico. No es algo puedas aprender de buenas a primeras. Es probable que tardes un tiempo en descubrir cuáles son los sitios y movimientos que te gustan.
Controlarás tus pensamientos
No todo está en la técnica de manipulación de tu clítoris y dentro de tu vagina. Un 50% de incidencia lo tienen tus pensamientos. La creatividad, la desinhibición y la relajación importa muchísimo para alcanzar un buen orgasmo. Por lo que aprenderás a controlar tus emociones y “pasar el interruptor” que apaga los problemas de cotidianos.
Alcanzarás la relajación absoluta
Ya que los niveles de dopamina y oxitocina de tu cuerpo aumentan y sentirás una sensación de placer y bienestar indescriptible. Por las noches, contribuye a encontrar el sueño.
Tu desempeño en la cama mejorará
Ya que tendrás la seguridad y certeza de lo que buscas en el acto sexual. Además, podrás explicarle a tu pareja dónde y cómo de te gusta que toquen, besen, muerdan o mojen.
Mejora tu salud
La masturbación es buen remedio contra el cólico menstrual y previene infecciones uterinas.
En el próximo artículo, se derrumbarán algunos mitos.