Cuando una serie nos atrapa, nos involucramos de tal manera que reímos, lloramos y nos entregamos totalmente a la historia y sus personajes.

Por ello, cuando llega el punto culminante, esperamos que esa historia tenga un final grandioso que llene nuestras expectativas y nos deje totalmente satisfechos.

Lastimosamente, ese no siempre es el caso y muchas veces no solo quedamos sumamente inconformes, sino que el final puede resultar tan decepcionante que nos arruina toda la imagen que tuvimos de esa serie.

En Notiboom somos fans de las series, por ello hicimos una lista de las 5 series que, para nosotros, tuvieron los finales más decepcionantes. 

1. Perdidos (Lost)

Más de un seguidor madrugó para ver en directo el final de Perdidos. Sin embargo, muchos sintieron que ese trasnocho fue un total desperdicio de tiempo.

Tramas sin concluir

A pesar de su enorme éxito, los seguidos de la ficción de ABC opinaron que algunas tramas no fueron aclaradas, por lo que el desenlace dividió al público entre detractores y amantes del final.

2. Two and a Half Men

Two and a Half Men fue una serie que gozó de gran popularidad gracias a Charlie Sheen, cuyo papel consistía en hacer una interpretación de sí mismo en la televisión.

Aquel personaje interpretado con tanta naturalidad por Sheen, encantó a millones de personas que terminaron convirtiéndose en seguidores leales de la serie de CBS.

Lastimosamente, con esa misma fuerza con la que Two and a Half Men se catapultó hacia la cima del éxito, se desplomó el día que sacaron a Charlie del elenco y lo decidieron remplazar por un Ashton Kutcher que nunca llenó las expectativas.

Las 4 peores temporadas de Two and a Half Men

Fueron 4 años de cambios forzados en la trama, de capítulos sin sentido y de grandes decepciones. Hasta que, finalmente, decidieron darle un cierre a lo que ya era una agobiante serie.

Final sin sentido

Sin entrar en detalles, el episodio que se tituló “Of Course He’s Dead” revela que Charlie nunca estuvo muerto, sino que fue secuestrado por Rose.

Sin embargo, cuando Charlie logra escapar y llega a su casa, un piano le cae encima, cual dibujo animado.

Seguidamente, el director Chuck Lorre es enfocado y exclama «¡gané!» para posteriormente ser también aplastado por un segundo piano.

Two and a Half Men fue una gran serie, probablemente asesinada por dos grandes egos; el de Charlie Sheen y el de Chuck Lorre.

3. Dexter

En algún tiempo esta serie fue más que grande… Cuando Dexter carecía de sentimientos, no sabía cómo actuar ante los demás y le daba pavor la paternidad.

Pero llegó Trinity, con una gran temporada y un final de impacto y mató a ese Dexter que nos gustaba.

Octava temporada

La octava temporada fue totalmente innecesaria.

El intento por desarrollar personajes secundarios y desaprovechar a otros, como es el caso de la doctora Evelyn Vogel (Charlotte Rampling), quien prometió tanto desde el primer capitulo, nos llevó a una última temporada sin emoción alguna y que desembocó en un final que Dexter no merecía.

Goodbye, Dexter Morgan

4 Dragon Ball GT

Quizás muchos no entenderán qué hace un anime en esta lista. Sin embargo, Dragon Ball no es cualquier anime, sino el más grande y uno de los más populares de la historia.

Esta serie nos acompañó desde la niñez, por lo que nunca pensamos en un final para esta animación japonesa que nos tenía acostumbrados a una constante evolución, como lo vimos desde Dragon Ball Z.

Hasta que llegó Dragon Ball GT y convirtió aquello que inició como una aventura emocionante en una terrible decepción.

Desde incoherencias en el argumento, hasta el inexplicable cambio de Goku al convertirlo en niño, todo fue terrible para los fieles seguidores.

Sin embargo, fue el final lo que dio la estocada más dolorosa con sucesos inexplicables y la aparente muerte definitiva de Goku, que solo provocó un sinfín de teorías que nunca fueron respondidas.

Sin duda, esta serie animada no podía estar fuera de la lista.

Ahora toca esperar que Dragon Ball Super se encargue de darle un mejor final al gran Goku.

5. Game of Thrones (final explicado)

Game of Thrones o Guerra de Tronos es posiblemente —dándole un mérito modesto— la serie más trascendental de la ultima década.

Con un argumento exquisito, una trama llena de intriga, codicia y engaño GoT vio morir a muchas series, mientras se mantenía en alto.

Y es que no hubo un momento en sus 8 temporadas en la que esta grandiosa serie basada en los libros de George R.R. Martin no mantuviese un impresionante rating.

Solo basta con ver los números de audiencia del primer episodio de la octava y última temporada, que fue visto por no menos de 17 millones de espectadores alrededor del mundo, para comprobar la influencia de esta serie épica.

La inexplicable locura de Daenerys Targaryen 

La lucha de las casas más importantes por los 7 reinos de Westeros, un reino ficticio, con una extensa historia, atrapó a los televidentes a un nivel pasmante.

Cada episodio era más esperado que el anterior, manteniendo al espectador en zozobra y gran expectativa sobre quien sería el próximo gobernante del reino.

En un punto culminante, en que todos veíamos venir la inevitable caída de Cersei Lanister, y con ella el recuerdo del reinado cruel que mantuvo su familia por años, la gran mayoría pensábamos que solo había dos alternativas para la corona: Daenerys Targaryen, y Jon Snow.

Sin embargo, no podíamos estar mas equivocados.

Todo dio un giro inesperado en el penúltimo capitulo, cuando Cersei ordenó que asesinaran a Missandei ante los ojos de Daenerys.

La decisión de Lanister provocó una locura desproporcionada en la Reina de Los Dragones, que aun cuando las tropas enemigas se habían rendido, por si sola con Drogon —el único dragón sobreviviente— convirtió a Desembarco del Rey en cenizas, sin importar si asesinaba a mujeres, ancianos o niños.

Daenerys —quien supuestamente sería una mejor gobernante que Cersei— asesinando a inocentes sin piedad, sin duda fue un golpe bajo para los fans, quienes al ver tales imágenes ya se esperaban un final nada glorioso para este personaje.

Pero aun así, nadie se esperaba lo que vendría después…

Lejos quedaron las predicciones de los «expertos» en GoT de la realidad.

Tyrion Lannister, al no estar de acuerdo con la masacre, es encarcelado por órdenes de la nueva dictadora. Jon le visita y tras una crucial conversación, Jon debe tomar una decisión: engañarse y asumir que las acciones de su amada fueron lo correcto, o terminar él mismo con su vida.

O al menos él pensó que solo tenía esas alternativas…

Y es que Jon se dirige a confrontar a una Daenerys sumergida en sus delirios de grandeza y tras una plática y un abrazo, decide segar su vida con un puñal.

El peor final jamás imaginado

De allí pasamos a otra escena, quizás la más importante,  la escena en la que se decide el futuro de Westeros.

Las casas más importantes de los 7 reinos se reúnen en Desembarco del Rey. La razón es verdaderamente importante: el futuro de Jon Snow.

Los Inmaculados lo tienen retenido y quieren juzgarlo; Sansa y Aria, acompañadas de un Ejército del Norte, no lo aceptan, pero no hay remedio, la única forma de evitar una guerra es juzgando de algún modo a Jon Snow.

No obstante, para tomar una decisión alguien debe tomar la corona.

Allí es donde entra nuevamente Tyrion, quien aún era prisionero de Los Inmaculados.

Al ver la falta de acuerdo para el próximo Rey de los 7 Reinos, Tyrion propone a Bran, quien es el cuervo de tres ojos, y en el que nadie pensaba para ocupar la corona.

Todos estuvieron de acuerdo, excepto Sansa, quien dio su visto bueno a su hermano, pero declaró la independencia del Norte alegando que lo merecía por sus luchas. Así Invernalia no estaría sujeta al nuevo monarca.

De esa forma, «habemus nuevo rey en Westeros».

La primera decisión de Bran fue liberar a Tyrion y hacerlo la mano del rey.

A partir de ahí todo fue tan inesperado como desafortunado.

El mejor trato que pudieron alcanzar para Jon, luego de ser una pieza fundamental para salvar al Norte y al mundo, fue enviarlo para El Muro.

Sin embargo, este fue un movimiento de Tyrion para que Los Inmaculados estuviesen de acuerdo y así Jon pudiese huir con Los Salvajes.

Sansa, como era de esperarse, se hizo con el trono del Norte y Arya terminó emprendiendo un viaje en una embarcación con el escudo de su casa, con el fin de explorar más del mundo.

Y así, con giros abruptos e inesperados terminó la que para muchos fue la mejor serie de la historia televisiva.

Algunos quedaron satisfechos, pero la gran mayoría vio su serie preferida ser arruinada.

 

 

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