Este martes, la organización Human Rights Watch (HRW) hizo una sorprendente declaración, acusó al Gobierno Kurdistán iraquí de torturar niños para que confiesen que formaron parte de las filas del ISIS.
Niños era obligados a confesar que eran parte del ISIS
Veinte niños de entre 14 y 17 años de edad fueron entrevistados por HRW en el reformatorio de mujeres y niños de Erbil, la capital de Kurdistán. Todos ellos dijeron haber sido acusados de pertenecer al ISIS. Del total de los menores, 16 dijeron que oficiales de seguridad kurdos «los habían torturado durante el interrogatorio en las instalaciones», dijeron además que fueron golpeados en todo el cuerpo con tubos de plástico, cables eléctricos o barras, incluso varios de ellos dijeron haber recibido descargas eléctricas.
En cuanto a la defensa de los niños, la mayoría de ellos dijo no tener acceso a un abogado, agregaron además que los ‘Asayish'(oficiales de seguridad kurdos) los obligaban a firmar confesiones pero no se las permitían leer.
«La mayoría de los niños aseveraron que sus interrogadores les dijeron lo que debían confesar» aseguraron de HRW.
Human Rights Watch denuncia al gobierno de Iraq por obligar a niños a confesar que pertenecían al ISIS
Uno de los menores entrevistados, de tan solo 14 años le dijo a HRW que los oficiales kurdos lo obligaron a decir que formaba parte del ISIS cuando esto no era cierto, por lo cual debió aceptar. Luego le dijeron que tenía que confesar que había trabajado para el ISIS durante tres meses. El intentó negarse pero lo amenazaron.
«Casi dos años después de que el Gobierno regional del Kurdistán prometiera investigar la tortura de niños detenidos, todavía ocurre con una frecuencia alarmante», señaló Jo Becker, director de defensa de los derechos de los niños para HRW.
A fines de 2017 fue cuando HRW comenzó a denunciar a las autoridades de Irak por cometer abusos de manera «desenfrenada» contra detenidos sospechosos de formar parte del ISIS.
En el momento de la entrevista de HRW, el personal del reformatorio informó que 63 niños se encontraban detenidos allí, acusados de delitos relacionados con el terrorismo, 43 de ellos ya han sido condenados. Human Rights Watch se dedicó también a entrevistar a personal del lugar, familiares de los menores y a dos detenidos de 18 años.