La mayoría de los médicos en la crisis por la pandemia de coronavirus están trabajando para salvar vidas. Pero, existen otros que se encuentran en el campo patológico forense centrados únicamente en los muertos.
Los especialistas forenses enfrentan grandes desafíos en las zonas de brotes, en la que los gobiernos toman decisiones muy limitadas pero esenciales para evitar un peligroso amontonamiento de cadáveres.
Aunque hay países, como el caso de Ecuador donde la cantidad de muertos por la pandemia de coronavirus es abrumadora, ya que no cuentan con la atención medica necesaria y han llegado al punto de que los cadáveres se encuentran tirados en las calles, sin que venga algún ente encargado y se los lleve.
¿Qué papel cumplen los forenses en una pandemia?
Este tipo de médicos son los que integran la ley y la medicina al mismo tiempo para determinar la causa, forma, mecanismo y hora de la muerte de una persona.
Durante la evolución de una pandemia estos especialistas son los que participan de manera intensa en la gestión de la crisis, tanto dentro de sus comunidades o formando parte del equipo enviado en una misión humanitaria para trabajar en comunidades vulnerables en el extranjero.
Su función es la de asegurar la gestión adecuada de los cadáveres, tratando de reducir lo más mínimo la propagación del virus y orientando a los hospitales y autoridades respecto a lo que se debe hacer con los fallecidos.
¿Infectan los cuerpos de las víctimas de la pandemia de Covid-19?
Hasta este momento no se sabe mucho sobre el coronavirus más allá de los síntomas y las cifras mortales que hay en todo el mundo, aún falta por entender bastante respecto a los modos de transmisión.
No se conoce a ciencia cierta si los restos humanos son infecciosos, pero la probabilidad de esto es bastante alta, por lo que los forenses de todo el mundo instan a los gobiernos a que se restrinja la visión y manejo de los cuerpos.
Los equipos de primeros auxilios no están capacitados ni deben de participar cuando se manipulan restos humanos durante un brote de enfermedad, y menos de esta pandemia que es altamente contagiosa.
A pesar de todas las medidas que utilizan los forenses de protección al manipular hoy en día los cadáveres, ellos se encuentran en un constante riesgo de exposición al virus.