Este martes, 17 de septiembre, un grupo de sacerdotes y pastores evangélicos convocaron a una oración colectiva en Ecuador para evitar que una reforma legal autorice el aborto en casos de violación. No obstante, organizaciones de derechos humanos organizaron una vigilia bajo el lema “déjame decidir”.

La Asamblea Nacional realizó la votación final de las reformas la tarde de este martes tras un dinámico y extenso debate sobre el aborto por violación, incesto y malformación del feto que demostró la polarización de un país conservador y con recónditas creencias religiosas.

La Fundación Desafío, una organización privada de defensa de derechos de la mujer, en su red social de Twitter publicó que siete niñas menores de 14 años deben parir diariamente a consecuencia de violaciones y otras siete niñas abortan silenciosamente por día, mientras que 11 mujeres denuncian violación sexual en el país a diario.

Desde el año 1938, las leyes contra el aborto en Ecuador están vigentes. Sin embargo, la última vez que el país debatió si legalizar o no el aborto en casos de violación fue en el año 2013 y la Asamblea votó en contra.

“Imploro a los asambleístas (…) que voten a conciencia”, dijo el Arzobispo de Quito, Alfredo Espinoza.

Si se llaman cristianos, si profesan una fe sepan que Dios es el Dios de la vida, no es el Dios de la muerte, añadió.

Según Reuters, en Guayaquil grupos religiosos colocaron pequeños ataúdes blancos con cruces negras para condenar “la muerte de una vida” formada desde la concepción. Asimismo, informó que desde la noche del lunes sacerdotes y pastores se unieron en jornada de oración permanente.

Por otro lado, Espinoza anunció que la Conferencia Episcopal analiza emprender acciones legales si se aprueban nuevas causales para abortar en el país, como en caso de violación.

Ninguna ley que legalice la muerte de un ser humano indefenso puede ser ética (…) si la aprueban será legal, pero nunca dejará de ser letal, dijo.

“Una mujer violada debe decidir qué hace con su embarazo, debe tener la oportunidad de parir ese hijo si así lo desea, o de interrumpir su embarazo, eso hoy día no es posible”, dijo Silvia Buendía abogada y activista de los derechos de las mujeres al medio antes indicado.

Lo que queremos es dar a una mujer violada la oportunidad de decidir, no es que una mujer violada debe interrumpir su embarazo, ninguna mujer debería abortar, las mujeres lo que tienen es que decidir, adicionó.

Dejar una respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here