El agua de rosas ha venido a representar un elemento necesario en la rutina del cuidado de la piel de cada mujer y es que si estás buscando un producto de belleza fácil de utilizar y con muchas propiedades ideales para cuidar tu piel, el agua de rosas es una excelente opción.

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¿Para qué sirve el agua de rosas?

El agua de rosas es un destilado de hierbas. Específicamente, de los pétalos de las rosas.

Es muy utilizado como componente en productos cosméticos, también como fragancia para aromatizantes de distintos tipos, para dar sabor y olor a comidas, por lo general postres.

En la cocina iraní es muy utilizada para la preparación de dulces, para el té y las galletas, mientras que en Arabia se utiliza en el pudín de arroz. Los andaluces valoran muchísimo su fragancia y la incluyen en muchos de sus platos.

El agua de rosas tiene su origen en el mundo Oriental, algunos dicen que de los países árabes y otros teorizan que en Irán, lo que anteriormente era conocido como Persia.

Fue desde Oriente Medio que vino a introducirse el agua de rosas en Occidente, siendo Francia el país occidental pionero en empezar procesos de destilación y la implementación del agua de rosas en distintos ámbitos.

En la actualidad, el agua de rosas de la mejor calidad es extraída en Bulgaria. Es la esencia más sofisticada y la más cara, la cual se extrae de la rosa de Alejandría, de Damasco o rosa damascena.

A través de la historia se ha utilizado como complemento en comidas o en el mundo de la belleza. En esta oportunidad veremos algunos de sus beneficios en la salud de nuestra piel, cabello, etc, y cómo eso puede contribuir a sentirnos bien en el interior y en el exterior.

¿Cómo actúa el agua de rosas en nuestra piel?

El agua de rosas posee muchas propiedades beneficiosas en nuestra piel y tiene un rápido efecto antioxidante. Contribuye al retraso del envejecimiento, fortaleciendo las células de la piel y regenerando los tejidos gastados.

También disimula las líneas, bolsas en los ojos, ojeras  y arrugas causadas por los efectos negativos del sol y el impacto de la contaminación.

Asimismo, posee grandes propiedades antiinflamatorias, pues contribuye a reducir la irritación y enrojecimiento en la piel causado por el acné, la dermatitis o distintas úlceras cutáneas.

Es un excelente coadyuvante en el tratamiento de este tipo de lesiones en la piel por sus propiedades antibacterianas, lo que causa un efecto cicatrizante acelerando la sanación de cortes, quemaduras, manchas y demás tipos de lesiones cutáneas. Relaja y refresca la piel que ha sido lesionada.

También, gracias a su propiedad antibacteriana y efecto limpiador, elimina el exceso de grasa y la suciedad que suele acumularse en los poros.

Su alto contenido en vitamina E, B, pectina y taninos le conceden un efecto reafirmante para piel, por lo que le otorga tonicidad, firmeza y flexibilidad a la piel.

El agua de rosas es una excelente opción para utilizar como tónico facial, ideal para pieles grasas, secas o mixtas, pues además, regula los niveles de grasa en la piel. Con solo aplicarlo todas las noches y dejar por unos minutos, notarás grandes cambios en la piel de tu rostro y cuerpo.

Agua de rosas en el cabello

Los componentes nutritivos e hidratantes del agua de rosas actúa sobre las inflamaciones o lesiones leves del cuero cabelludo reduciendo la irritación y fortaleciendo la capa externa de la piel de este área, lo que previene la caída del cabello y refuerza el cuero cabelludo.

Por estas razones, estimula en gran manera el crecimiento del cabello, no sólo lo alarga sino que le da fuerza y flexibilidad, evitando el quiebre y la caída.

Asimismo, reduce la caspa y purifica profundamente el cuero cabelludo, removiendo los residuos de las cremas de peinar, los enjuagues y demás productos. Además de esto, hidrata profundamente el cabello, dándole brillo y una textura suave.

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