De acuerdo al regulador irlandés que supervisa el negocio de Google, la gigante de la búsqueda online estaría utilizando páginas web ocultas para compartir con sus anunciantes información personal y de preferencias de sus usuarios.
La información la dio a conocer el diario Financial Times, publicación que afirma que Google utiliza este método para poder eludir las normas de privacidad de la Unión Europea, rompiendo así con sus propias políticas al “explotar datos privados sin suficiente control ni preocuparse por la protección de los mismos”.
Johnny Ryan, el jefe y responsable de las políticas del buscador Brave, afirmó para Financial Times que descubrió estas páginas ocultas cuando intentaba conocer cómo Google estaba utilizando sus datos privados.
En esta investigación, Ryan encontró que Google le había etiquetado con un rastreador que ofrecía sus datos a una tercera empresa que se había identificado en una página oculta, la cual no mostraba ningún contenido más allá de la dirección que correspondía a la actividad virtual de Ryan.
Sería así, entonces, como los anunciantes de Google pueden hacer uso del perfil de sus usuarios, con sus preferencias web, para mostrar determinados anuncios ajustados a sus gustos.
Esto significa que Google crea una página que el usuario no ve, una página en blanco, sin contenido, pero que permite que terceras compañías espíen al usuario.
En respuesta al reporte, Google afirmó que no publica “anuncios personalizados ni envía solicitudes de oferta a los licitantes sin el consentimiento del usuario”.
Sin embargo, Google estaría bajo investigación desde mayo por parte de la Comisión de Protección de Datos, ente que recibió una queja por parte de Brave de que Google estaba violando las regulaciones de protección a la privacidad de la Unión Europea.
El proceso que ahora denuncia Brave parece ser una práctica llamada en inglés como “Cookie matching” o sincronizador de Cookies, la cual serviría para hacer coincidir anuncios en múltiples sitios en función con el historial de navegación de cada usuario.
Una página de desarrolladores de Google explica el proceso y los principios de privacidad utilizados para poder llevarse a cabo, como no permitir que las empresas recopilen la información a la que accedieron.
Esta acusación contra Google llega en medio de una multa de 170 millones de dólares recibida por la compañía estadounidense por haber vulnerado la privacidad de los niños a través de su plataforma de vídeos, YouTube.
La multa, acordada por la Comisión Federal de Comercio de EE.UU. (FTC) y la Fiscalía de Nueva York, se trataría de la sanción económica más elevada en un caso de protección de menores en Internet hasta el momento.