El mandatario de EE.UU., Donald Trump, salió de la Casa Blanca el miércoles por la tarde y se dirigió triunfal hacia las cámaras de televisión para declarar que el testimonio de Robert Mueller en el Capitolio fue un “muy buen día” para él y para los republicanos.
Además, aseveró que las audiencias finalizaron con los legisladores demócratas obteniendo “menos que nada” para continuar sus investigaciones sobre él.
El ex fiscal especial, bajo juramento, confirmó la exactitud de los casos de posible criminalidad de Trump detallados en su informe de casi 450 páginas y reiteró una vez más que no había exonerado en modo alguno al presidente en funciones. No obstante, para Trump, la visión de que los demócratas quedaron con las manos vacías en términos de información nueva o condenatoria era todo lo que importaba.
Fue un gran día para nuestro país, fue un gran día para el Partido Republicano y se podría decir que fue un gran día para mí, comentó Trump.
“Los demócratas no tenían nada y ahora tienen menos que nada y creo que van a perder las elecciones de 2020 por mucho, incluidos los escaños del Congreso, debido al camino que eligieron”, agregó.
La alegría no le duró mucho a Trump
Trump se volvió visiblemente furioso cuando se le insistió sobre algunos aspectos del testimonio de Mueller, incluida la afirmación del ex fiscal especial de que Trump podría ser acusado después de dejar el cargo.
En respuesta, el mandatario señaló que Mueller había corregido esa declaración y criticó a los reporteros que le preguntaron sobre los comentarios de Mueller, llamándolos “noticias falsas”.
Trump además se mostró molesto cuando los reporteros le preguntaron sobre los comentarios de Mueller de que él “en general” estaba de acuerdo en que las respuestas escritas de Trump a él no siempre eran veraces.
En respuesta reiteró que su decisión de no presentarse a una entrevista con Mueller durante la investigación fue “lo correcto” debido a la cantidad de testigos acusados de mentir a los investigadores.
Hay que recordar también que, el miércoles por la mañana, Trump acusó a Mueller de tener conflictos de interés relacionados con la investigación, incluso, difamó al equipo de fiscales de Mueller como “Demócratas enojados” y una vez más proclamó “¡NO HAY COLUSIÓN, NO HAY OBSTRUCCIÓN!”, conclusiones a las que Mueller no llegó a su informe.