Este martes, el pueblo estadounidense revivió el viaje a la luna en el Apolo 11 desde Cabo Cañaveral, Florida a través de una retransmisión “en directo” del evento histórico.
La actividad se realizó con el fin de celebrar los 50 años de esta hazaña de la humanidad que llevó al astronauta Neil Armstrong a viajar hasta el espacio el 16 de julio de 1969.
Al respecto, Robert Hart, técnico de la NASA que trabajó en la misión que llevó al primer hombre a la luna, afirmó que le gustaría poder volver a ver un viaje al satélite natural con el fin de establecer allí una base que los conduzca, en un futuro, hasta marte.
Charlie Duke, el responsable de las comunicaciones con la nave espacial comandada por Armstrong, también participó en la jornada en celebración de la salida del Apolo 11.
Las icónicas imágenes del despegue del Apolo 11, pertenecientes a la cadena estadounidense CBS, sirvieron como documento audiovisual para el mundo de uno de los más grandes logros de la historia, un sueño en el que se trabajó gran parte del siglo XX y para el que se compitió con Rusia, país que también intentaba llegar a la luna.
Asimismo, forman parte de las pruebas recogidas por más de 3.000 periodistas pertenecientes a 56 países que asistieron al evento mundial en 1969 que daría inicio a una de las historias más fascinantes de la ciencia.
La recreación del despegue del Apolo 11 no solo se llevó a cabo desde el estado de Florida, pues La Biblioteca John F. Kennedy y la compañía tecnológica Digitas colaboraron para retransmitir las imágenes en realidad aumentada desde la Bahía de Dorchester en Boston, Massachusetts.
“Un pequeño paso para el hombre, un gran salto para la humanidad”
La transmisión original del despegue y aterrizaje del Apolo 11 en 1969 le costó a la ABC, CSB Y NBC alrededor de 11 y 12 millones de dólares por las 76 horas que cubrirían del viaje de Neil Armstrong (comandante), Buzz Aldrin (piloto del módulo lunar) y Michael Collins (piloto del módulo de comando).
Sin embargo, la inversión valía la pena, pues no solo sirvió como prueba del avance tecnológico estadounidense para la época, sino que todo el mundo pudo ser testigo de la odisea de unos 386.000 kilómetros para alcanzar la luna.
La idea de llevar al hombre a la luna se le atribuye, por supuesto, al entonces presidente norteamericano, John F. Kennedy quien se puso la meta de ser el primer país en llevar a un astronauta a la luna y que el mismo regresara sano y salvo a la tierra.
Al respecto, Kennedy afirmó: “Ningún proyecto espacial en este período será más impresionante para la humanidad o más importante para la exploración a gran distancia del espacio; y ninguno será tan difícil o costoso de lograr”.
Por supuesto, tenía razón, pues la hazaña le tomó al gobierno norteamericano unos seis años en completar. Sin embargo, lo lograron y primero que su rival en la Guerra Fría, la Unión Soviética.