La primera ministra británica, Theresa May, fijará un cronograma para abandonar el cargo a principios de junio tras el cuarto intento de aprobación de su acuerdo de Brexit por el Parlamento, indicó el presidente del Comité 1922 de su Partido Conservador este jueves.
May prometió renunciar una vez que el acuerdo de Brexit sea aprobado por los parlamentarios, pero está sometida a una presión creciente por una facción de su partido para que deje claro cuándo dimitirá, incluso si el acuerdo es rechazado por cuarta vez.
Ahora bien, el gobierno afirmó que los legisladores podrán debatir y votar su proyecto de Acuerdo de Salida -la legislación requerida para que su pacto entre en vigor- en la semana que comienza el 3 de junio.
“La primera ministra está decidida a garantizar nuestra salida de la Unión Europea y está dedicando sus esfuerzos a asegurar una segunda lectura del Acuerdo de Salida en la semana que comenzará el 3 de junio de 2019 y su aprobación, con el consecuente adiós de Reino Unido a la Unión Europea en el verano (boreal)”, puntualizó Graham Brady, presidente del Comité 1922, en un comunicado tras reunirse con May.
“Hemos acordado reunirnos tras la segunda lectura del proyecto para acordar un cronograma para la elección de un nuevo líder del Partido Conservador y Unionista”, agregó.
El acuerdo de Brexit de May ha sido rechazado en tres ocasiones
Según Reuters, May sobrevivió a una moción de confianza en diciembre y, bajo las leyes del partido, no puede ser desafiada otra vez en un año. Algunos integrantes del comité de Brady presionaron para cambiar esas normas y obligarle a renunciar antes.
Además hay que recordar que el acuerdo de Brexit de May ha sido rechazado en tres ocasiones por el Parlamento y semanas de conversaciones con el opositor Partido Laborista -una iniciativa profundamente impopular en parte de las filas conservadoras- no lograron alcanzar un consenso sobre cómo avanzar.
El estancamiento del Brexit y el aplazamiento del adiós británico a la UE desde el 29 de marzo previsto inicialmente llevó a los conservadores a sufrir grandes pérdidas en las elecciones locales de este mes, mientras que los sondeos previos a las elecciones al Parlamento Europeo del 23 de mayo les sitúan muy atrás en las preferencias de los votantes.