Las resoluciones de Estados Unidos y de Rusia con respecto a la salida de la crisis que afronta Venezuela han sido rechazadas por el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) este jueves.
El proyecto de EE.UU. recibió el apoyo de nueve de los 15 miembros del organismo, entre ellos: Francia, Gran Bretaña, Alemania, Perú y República Dominicana. Cifra que hubiera bastado para aprobarlo, si no fuera por el doble veto de China y Rusia. Por su parte, Sudáfrica votó en contra, mientras Indonesia, Guinea Ecuatorial y Costa de Marfil se abstuvieron.
La resolución estadounidense urgía a celebrar elecciones “justas” en Venezuela y pedía el ingreso “sin trabas” de la ayuda humanitaria.
En tanto, el texto ruso obtuvo cuatro votos a favor de: Rusia, China, Sudáfrica y Guinea Ecuatorial, siete en contra y cuatro abstenciones. Esta resolución expresaba inquietud por “las amenazas de uso de la fuerza” en Venezuela y por los “intentos de intervención en asuntos” internos del país, apoyaba una “solución política” y “pacífica” de la crisis e insistía en que el gobierno de Maduro es el único que tiene autoridad para solicitar ayuda y coordinar su ingreso y distribución.
Comentarios acerca de los resultados obtenidos tras las votaciones
Elliott Abrams/ FOTO: EFE
El enviado especial de EE.UU. para Venezuela, Elliott Abrams, aseguró que «al votar en contra de esta resolución, algunos miembros de este consejo continúan protegiendo a Maduro y sus amigos y prolongando el sufrimiento del pueblo venezolano», al tiempo que celebró que “una clara mayoría” haya votado a favor.
«Esta crisis se ha extendido mucho más allá de las fronteras de Venezuela y amenaza con desestabilizar la región», agregó.
Por otro lado, el embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia, señaló que “Estados Unidos parece haber olvidado lo que es el derecho internacional. (…) Esto es una cortina de humo, lo único que desean es que haya un cambio de gobierno (…) disfrazado de asistencia para la gente”.
Finalmente, indicó que estaban preocupados por el hecho de que la reunión de hoy puede ser explotada como un paso para “los preparativos de una intervención real, no humanitaria (…) como resultado de la supuesta incapacidad del Consejo de Seguridad para resolver la situación en Venezuela».
El número dos chino en la ONU, Wu Haitao, sostuvo por su lado que “las cuestiones de Venezuela deben ser decididas por el pueblo venezolano”, por más nadie.