Turquía ha ignorado las sanciones de EE.UU. y continúa con su ataque al norte de Siria, este martes.
Por su parte, las fuerzas del gobierno sirio ingresaron al centro de la ciudad de Manbij, según Reuters, punto crítico donde las tropas estadounidenses habían realizado patrullas conjuntas con Turquía. La agencia de noticias detalló que había banderas rusas y sirias desde un edificio en las afueras de la ciudad, y desde un convoy de vehículos militares.
Además, las fuerzas estadounidenses anunciaron que se habían retirado de la ciudad.
Cabe recordar, que una semana después de revertir la política de EE.UU. y dirigir a las tropas para dejar que Turquía ataque a los aliados sirios de Washington, el mandatario de EE.UU. avisó sobre un paquete de sanciones, principalmente un aumento en los aranceles al acero y una pausa en las conversaciones comerciales.
Sin embargo, la lira turca, que había caído ante la expectativa de sanciones estadounidenses más estrictas, se recuperó luego de que se comunicaron las medidas, al igual que sus mercados de bonos y acciones. En consecuencia, los operadores puntualizaron que Trump había salvado a los bancos turcos.
La decisión del mandatario estadounidense de retener la protección de los kurdos de Siria posteriormente de una llamada telefónica con Tayyip Erdogan, presidente turco, hace una semana, alteró rápidamente cinco años de la política estadounidense en Oriente Medio, explicó el portal Israel Noticias.
El domingo, EE.UU. informó que iba a retirar a sus 1.000 soldados del norte de Siria. Sus antiguos aliados kurdos forjaron inmediatamente una nueva alianza con el gobierno de Assad, respaldado por Rusia, invitando al ejército a ciudades en todo su territorio.
En respuesta, las fuerzas sirias se movieron rápidamente para llenar el puesto de los EE.UU. que partían de Manbij al oeste del río Eufrates, que Turquía prometió capturar.
El coronel Myles B Caggins, portavoz de la coalición liderada por EE.UU. en Siria, manifestó que estaban fuera de Manbij.
“Estamos fuera de Manbij”, dijo. Al tiempo que agregó que las tropas “están ejecutando una retirada deliberada del noreste de Siria”.
La retirada de EE.UU. coloca punto final a las patrullas conjuntas entre EE.UU. y Turquía del área de Manbij en virtud de un acuerdo destinado a persuadir a Turquía de que no invada.
Incluso, Trump defendió su inversión de la política estadounidense como parte de un plan para retirar a EE.UU. de las guerras “interminables” en el Medio Oriente.
Pero, la portavoz demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, advirtió que las sanciones fueron demasiado pequeñas y demasiado tarde.
Su anuncio de un paquete de sanciones contra Turquía no llega a revertir ese desastre humanitario, dijo.
Los aliados de Trump insistieron en que Washington no había dado su bendición a la ofensiva turca y exigieron un alto el fuego.