A apenas un mes para la investidura de Pedro Sánchez, el líder del PSOE retrasa hasta septiembre sus negociaciones parlamentarias para lograr una aceptación a su gobierno y, en su lugar, apuesta por presionar a Unidas Podemos a prescindir de una coalición.
Y es que según Isabel Celaá, portavoz ejecutivo, Sánchez no se reunirá con ningún partido ni esta semana, ni la próxima, pues preferiría seguir recibiendo a asociaciones civiles y a sus miembros en reuniones para, según su gobierno, escuchar demandas y construir un plan legislativo.
Celaá, además, detalló que Sánchez quiere “consolidar” un “proyecto político pragmático” y eso significaría esperar hasta, por lo menos, finales de Agosto, para “a partir de ahí” recuperar el contacto con el sector político español.
“Es el presidente quien marca los tiempos”, sentenció Celaá.
No obstante, el tiempo no estaría moviéndose al son de Sánchez y es que, de no conseguir el apoyo suficiente, el Rey, con el referendo de la presidenta del Congreso, disolverá las Cortes y el BOE al día siguiente y convocará a nuevas elecciones 47 días después, las terceras en los últimos cuatro años.
Es decir, que el pueblo español acudiría nuevamente a las urnas el 10 de noviembre tras una campaña exprés que iniciaría el 1 de ese mismo mes.
Al respecto, Celaá opina que es obvio que no existen condiciones para un gobierno de coalición y que la negociación del mes de julio, junto con la investidura fallida era más que prueba suficiente.
“Hay suficiente desconfianza como para que nos resulte transitable esa opción”, recalcó Celaá, quien además señala que es un falso dilema que Unidas Podemos hable de “gobierno de coalición o elecciones”, porque, en su opinión, hay muchas opciones viables para salir del bloqueo.
A pesar de esto, Pablo Iglesias, líder de Podemos, advirtió en una carta a sus bases que de ninguna manera aceptarán la propuesta socialista de Sánchez.
De acuerdo a Iglesias, esto se debería a que Sánchez es un “trágala”, “un irresponsable” y un “fracasado”.
“Lo que ni nosotras ni ninguna otra formación política puede aceptar es un trágala”, expresó Podemos en su misiva, en la que insta al PSOE a “regresar a la mesa de negociación cuanto antes” y a “estar a la altura del momento político en el que nos encontramos”.
“Juntos por Cataluña” replantearía su voto bajo ciertas condiciones
Mientras Sánchez se reúne con ambientalistas y otras sociedades civiles, “Juntos por Cataluña” insiste en que podría replantearse su “no” a la investidura del líder socialista y evolucionar a, al menos, una abstención si el presidente en funciones acepta “recuperar un espacio estable de diálogo bilateral con el Gobierno de Catalunya para abordar la solución al conflicto político”.
Así lo afirmó el diputado catalán Jordi Sànchez desde la cárcel de Lledoners (Barcelona), quien detalló que el acuerdo era “bien simple”.
“Volver al espíritu del 20 de diciembre de 2018 en el Palau de Pedralbes. Ni más ni menos. Fíjese si es fácil”, indicó Sànchez, abogando por la Declaración de Pedralbes que firmaron la Generalitat y el gobierno central con Quim Torra y Pedro Sánchez al frente.