Un atentado suicida en Afganistán se dio a lugar este lunes en un conjunto de oficinas gubernamentales, dejando al menos 43 fallecidos. El atentado se prolongó durante varias horas y acabó, además, en la muerte de 4 de sus atacantes, así lo confirmó el portavoz del ministerio del Interior de Afganistán, Najib Danish, así como el portavoz adjunto del mismo Ministerio, Nasrat Rahimi. El conjunto alberga diferentes organismos como lo era el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.
La fuerzas armadas afganas lograron detener a tres de los atacantes que significó la liberación de al menos unas 350 personas que se encontraban retenidas dentro del complejo. El cuarto atacante falleció en la explosión del coche bomba, afirmó Rahimi. Además, uno de los rehenes rompió varios de sus huesos tras saltar del tercer piso del edificio, intentando huir de los terroristas, otros dos resultaron heridos por cristales, información que conocemos gracias a France Presse, quienes estuvieron presente en el hospital encargado de atender a las víctimas.
No se ha determinado que grupo causó el atentado en la capital afgana, pero no se descarta que sea un provocación contra los tratados de paz
De momento, se desconoce a qué grupo terrorista se encuentra detrás del atentado, siendo que ninguno ha manifestado responsabilidad, tampoco ha sido posible identificar a los occisos. Este supone segundo atentado en menos de 30 días, puesto que el pasado 28 de noviembre, el grupo talibán hizo estallar un automóvil bomba en el complejo donde hacen vida la Sociedad de Seguridad británica G4S, ocasionando la muerte a 10 personas.
El ataque se produce en una semana intensa para el país asiático, luego del anuncio, que aún no se ha confirmado, del retiro próximo de al menos 7.000 de los 14.000 militares estadounidenses que se encuentran dentro de dicha nación. Medida que sería posible luego de meses de esfuerzos y estrategias para activar las negociaciones de paz con los talibanes.
Hace una semana, se pudo conocer gracias a la prensa de los Emiratos Árabes Unidos que las conversaciones de reconciliación entre Estados Unido y los talibanes de origen afgano, en Abu Dabi, arrojaron resultados positivos y contundentes. Este conflicto inició en 2001 tras la invasión estadounidense contra los talibanes en señal de respuesta a los ataques de las Torres Gemelas de Nueva York, el 11 de septiembre de dicho año.