Luego de 40 días de que el gobierno de China expresara el hecho de que van aprobar una ley de seguridad nacional para Hong Kong, dicha legislación entró en rigor, ya que tiene ramificaciones masivas para la libertad política de esa ciudad.
La ley se redactó prácticamente en secreto, mediante reuniones realizadas a puerta cerrada en Beijing, en las que ni siquiera tuvo parte la jefa ejecutiva de esa ciudad, Carrie Lam. Por lo que ella y la mayoría de hongkoneses no tenían idea de lo que contenía la ley.
Esta fue promulgada el día martes, sin haber pasado por la legislatura local, lo que es considerado un delito que pone en peligro la seguridad nacional, las actividades terroristas, actos de secesión y más.
Se había sugerido que las sanciones bajo la nueva ley serían más suaves de lo que son en China. Pero luego de darse a conocer el contenido de esta, se sabe que la pena máxima por los cuatro delitos principales, que son: terrorismo, secesión, subversión y colusión con fuerzas extranjeras, puede castigarse hasta con cadena perpetua.
En ciertas circunstancias puede suspenderse el derecho que tiene un ciudadano de un juicio con jurado. Los residentes extranjeros que estén en Hong Kong pueden ser expulsados en caso de sospecha de violación de la ley.
Esta ley también extiende el control directo que tendría Beijing sobre Hong Kong. En caso de conflicto la ley de seguridad nacional prevalece sobre cualquier otra ley ya existente de la ciudad.
La ley de seguridad nacional supuestamente devuelve la estabilidad y prosperidad
Los diversos funcionarios han argumentado que esta nueva ley es sumamente necesaria, aunque llegó un poco tarde. Pero de igual forma solo afectará a una minoría de la población local. Devolviendo la prosperidad y sobre todo la estabilidad a la ciudad.
Expresaron que:
“La ley de seguridad nacional es un paso crucial para terminar con el caos y con la violencia que ha ocurrido en los últimos meses. Es una ley que se ha introducido para mantener a Hong Kong a salvo. La legislación es legal, constitucional y razonable”.
Los extranjeros están amenazados
El impacto que tendrá esta nueva ley también afecta a todos los extranjeros que ahí residan. Incluyendo a los medios de comunicación y las ONG que operan dentro de la ciudad.
Aquí se establece que toda persona, directa o indirectamente que reciba alguna instrucción, financiamiento, control o cualquier otro apoyo de un país extranjero, organización, institución o individuo puede ser culpada de un delito. En caso de que sus acciones sean consideradas hostiles a los intereses que tiene la seguridad nacional.
Hong Kong de por sí ha sido conocida durante mucho tiempo como una “ciudad de protesta”. Debido a que cuenta con un movimiento de oposición vibrante, de medios sin cadenas y un discurso público muy dinámico. Pero la ley de seguridad nacional parece apuntar a condenar todo esto. Por lo que la ciudad podría remodelarse para siempre.