Investigadores chinos llevan a cabo una prueba de inteligencia artificial general con un novedoso chip que realiza las mismas tareas intelectuales que los humanos.
Un chip del futuro que ya está aquí
No nos cambia el chip si vemos a un persona por la calle montando en bicicleta, pero seguro que llamará nuestra atención si la vemos circular por su cuenta, sin nadie pedaleando.
No se trata de un espíritu errante, sino de una bicicleta aútonoma, capaz de mantener el equilibrio, modificar su la trayectoria y, en caso de necesidad, esquivar obstáculos.
El ingenio funciona con un novedoso chip híbrido, diseñado por investigadores de la universidad de Beijing, que integra circuitos inspirados en la computación y en la neurociencia.
El equipo de investigadores, liderados por Luping Shi, se ha aproximado a lo que hasta ahora parecia imposible, hacer compatibles los algoritmos de aprendizaje computacional y las redes neuronales.
El híbrido se basa en el chip Tianjic, desarrollado en 2015, un circuito que emula a una neurona y permite, a bajo coste, el desarrollo de redes neuronales de alta velocidad.
La ventaja que presenta este nuevo chip híbrido frente a su predecesor es que pueden adaptar según necesidades tanto los circuitos neuronales como los algoritmos de aprendizaje.
En busca de la máquina que pueda albergar el chip
La inteligencia artificial avanza que es una barbaridad y algunas empresas ya trabajan en en esta inteligencia artificial global, AGI en sus siglas inglesas.
AGI será capaz de aprender y trabajar con una gran cantidad de datos, y de tomar decisiones complejas realizando nuestras mismas tareas intelectuales.
Pero emular el cerebro humano no es tan sencillo. Su arquitectura, su vasta red neuronal y su jerarquización son tan complejas que con el estado de la tecnología actual resulta inabordable.
Si lo que se pretende es crear una inteligencia artificial que emule al cerebro, será necesaria una compleja arquitectura que la pueda albergar.
Deberá ser una máquina que la integre espacio temporalmente. Además de redes neuronales que trabajen en paralelo, módulos de diferente tamaño y complejidad , y capacidad para trabajar con un amplio número de modelos, algoritmos y códigos.
¿Y funcionará en una mountainbike?