Uno de los postres más ricos y fáciles de hacer para disfrutar de una buena merienda en compañía de familiares y amigos es un bizcocho de vainilla. Estos pueden acompañarse con café, té o alguna otra bebida de preferencia personal.
A los niños le encanta este tipo de postres, así que no puedes negarte a realizar uno y mucho menos cuando es sumamente sencilla su realización.
Lo novedoso que tenemos en esta receta es que no es necesario utilizar el horno, puesto que este bizcocho se puede realizar fácilmente en un sartén y quedará como el tradicional.
Para poder llevar a cabo esta receta deliciosa necesitarás:
- 2 tazas de harina de trigo
- 1 taza de leche
- 1 huevo
- 1 taza de azúcar refinada
- 2 cucharaditas de vainilla
- 2 cucharaditas de polvo de hornear
- Ralladura de un limón
- 60 gramos de mantequilla derretida
Preparación del bizcocho
Lo primero que tienes que hacer es batir el azúcar y el huevo hasta que obtengas una especie de crema. Luego incorpora la mantequilla derretida, la esencia de vainilla, la ralladura de limón, la leche y la harina junto con el polvo de hornear (estos tienen que tamizarse antes).
Después debes de agarrar un sartén antiadherente o alguna olla y aplicar en la superficie un poco de aceite de oliva y posteriormente agregar la mezcla.
Es importante que esta no supere más de la mitad del sartén, puesto que la mezcla puede comenzar a salirse.
Lo que debes de hacer a continuación es cocinar a fuego lento con una tapa durante 30 minutos. Transcurrido este tiempo deber de dar la vuelta al bizcocho (aquí puedes usar un plato para ayudarte). Antes de colocar de nuevo el bizcocho en el sartén se debe de volver a colocar aceite de oliva y cocinar durante 15 minutos más.
Finalmente, retira el bizcocho del sartén y espolvorea azúcar o una capa de chocolate o dulce de leche para untar. ¡Listo! Ya preparaste tu delicioso bizcocho de forma rápida y sencilla.
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