Una ‘cacería de brujas’ se esta llevando a cabo en Ibarra, Ecuador, tras el lamentable caso de Diana Carolina Rodríguez Reyes, la chica ecuatoriana que fue asesinada a puñaladas, por el ciudadano Venezolano Yordy Rafael L. G delante de las autoridades, que no pudieron hacer nada más que observar.
La multitud, fuera de control, ha insultado, golpeado y peor aun: ha violentado las residencias de familias venezolanas, sin importar si hay niños presentes, llegando a quemar sus cosas y a perseguirlos hasta sacarlos a la fuerza de la comunidad. Todo esto, a pesar de que estas personas, no tienen nada que ver con las acciones despiadadas de su compatriota.
Mientras tanto, las autoridades se han mantenido indiferentes, permitiendo que se forme una revuelta excesivamente violenta que ha puesto en peligro a la comunidad Venezolana en esa localidad.
Así se desarrolló una revuelta ciudadana en la que hombres, mujeres y niños Venezolanos fueron agredidos
Multitud persigue y agrede a Venezolanos en el terminal de Ibarra
Mientras los ciudadanos descontrolados buscan venganza; las autoridades no hacen acto de presencia
Un hombre Venezolano fue brutalmente golpeado por una multitud
También entraron ilegalmente a sus casas y quemaron sus pertenencias
Las autoridades son responsables de la vida de los Venezolanos inocentes
La muerte de la joven Diana Carolina Rodríguez Reyes en manos del ciudadano Venezolano, que de manera cruel, le arrebato la vida, sin importar que estuviese embarazada; es algo lamentable y cruel.
Sin embargo, este tipo de agresiones violentas, hacia personas que no tuvieron nada que ver con los hechos, resultan injustificables, y es responsable el gobierno del Ecuador y sus autoridades, de la trascendencia que tengan estas acciones.
En estos momentos, se están violentando los derechos humanos de los ciudadanos Venezolanos de Ibarra, y no vemos a las autoridades haciendo algo al respecto.
Desde este humilde medio de comunicación, ante el silencio de las autoridades, denunciamos esta barbarie, así como hacemos la denuncia de que hay Venezolanos, que han sido brutalmente agredidos, y posiblemente se encuentren en estado de gravedad o quizas muertos, por tal razón, deben las autoridades apersonarse en el lugar y resguardar la integridad de estas familias Venezolanas que no han cometido ningún crimen.