El clérigo pakistaní Maulana Sami ul-Haq, conocido como el padre de los talibanes, fue asesinado en la ciudad norteña de Rawalpindi.
Los medios locales citaron a los miembros de su familia diciendo que fue apuñalado hasta la muerte. Pero otros informes dicen que fue asesinado a tiros.
El motivo del ataque no está claro.
Haq era el jefe de la madraza de Haqqania en el norte de Pakistán, donde habían estudiado muchos miembros talibanes, incluido el fundador del grupo, Mullah Omar.
¿Qué se sabe sobre el ataque?
Todavía hay informes contradictorios de cómo exactamente fue asesinado Haq.
El hijo del clérigo dijo que su padre fue apuñalado «varias veces» en la casa que tenía en Rawalpindi.
«Estaba descansando en su habitación cuando su chofer y guardia salió durante 15 minutos», dijo Maulana Hamid ul-Haq, citado por la televisión paquistaní Geo TV.
«Cuando regresó, encontró a Maulana Sami ul-Haq muerto en su cama y su cuerpo cubierto de sangre».
Mientras tanto, el sobrino de Haq, Mohammad Bilal, dijo a Reuters que su tío fue encontrado con puñaladas y heridas de bala en su casa en las afueras de Islamabad.
Ningún grupo ha reivindicado hasta ahora la responsabilidad del ataque del viernes.
Temores de violencia
Los funcionarios afganos le habían pedido recientemente al clérigo, que se cree que tenía unos 80 años, que ayudara a convencer a los talibanes de comenzar las negociaciones de paz.
Era un ex senador que dirigía una facción del partido religioso Jamiat Ulema-e-Islam, y estaba cerca del partido PTI del primer ministro Imran Khan.
El Señor Khan se encuentra actualmente en una visita oficial a Beijing, pero su oficina dijo en una declaración que condenó el asesinato y ordenó una investigación.
La muerte del clérigo se produce en un momento de agitación en Pakistán, donde han estallado protestas en varias ciudades después de la absolución de una mujer cristiana condenada a muerte por cargos de blasfemia.
Haq tenía miles de seguidores entre sus estudiantes, así como miembros afganos y talibanes locales. El Señor Ilyas Khan de la cadena BBC dice que existen temores de que su asesinato pueda causar más problemas en las calles.
