Mohamed Hadid, quien es el padre de las hermanas supermodelos Gigi y Bella Hadid, se declaró en bancarrota en nombre de su empresa después de ser acusado de construir ilegalmente una mega mansión que era más grande de lo que permitían las reglas de la ciudad.
La compañía de Hadid, 901 Strada LLC, solicitó la reorganización en la corte federal de bancarrotas el miércoles, el día antes del Día de Acción de Gracias. El patriarca Hadid, de 71 años de edad, declaró que la compañía tiene una deuda de $ 10-50 millones debido a la construcción de su mansión Bel-Air de 30.000 pies cuadrados, que según los informes comenzó en 2011, según documentos judiciales obtenidos por Daily Mail y TMZ.
Sin embargo, el abogado de Hadid, Bruce Rudman, refutó los informes de Daily Mail que señalaron que Hadid estaba “en quiebra” en el Tribunal Superior de Los Ángeles.
En la declaración de quiebra, Hadid, quien hizo cameos en las Reglas de las amas de casa reales de Beverly Hills y Vanderpump de Bravo, según los informes, dijo que la compañía tiene una deuda de más de $ 386.000 con una empresa de diseño y administración. Además, afirmó que su compañía tiene una deuda de más de $ 200.000 con una compañía de materiales de construcción y que debe más de $ 93.000 a una compañía de demolición y más de $ 35.000 a fontaneros.
El desarrollador, que estuvo casado con la exalumna de RHOBH, Yolanda Hadid, también dijo que su mansión requiere atención inmediata con la necesidad de estar físicamente asegurada o protegida del clima, según TMZ, que incluso informó que los contribuyentes locales tendrían que pagar los gastos de la mansión si Hadid no paga los $ 5 millones estimados para demolerla.
La solicitud de protección del Capítulo 11 se produce después de que los vecinos de Hadid presentaron una demanda el año pasado y calificaron la construcción de su mansión Bel-Air como “la estructura más ilegal jamás construida” en Los Ángeles, según el New York Daily News, que también obtuvo los últimos documentos judiciales. La demanda está programada para ir a juicio en marzo del año 2020.
“Si esta casa bajara la colina, se llevaría una parte del vecindario”, dijo el juez Craig Karlan en una audiencia la semana pasada, informó TMZ.
Según los informes, Hadid refutó las acusaciones de que su casa es “insegura” y le dijo a TMZ el 22 de noviembre: “¡La casa no se ha movido ni un milímetro! Nunca ha sido un peligro inminente para los vecinos”.
El padre de cinco hijos también presentó documentos judiciales por separado recientemente, pidiéndole al juez que suspenda temporalmente la demanda con sus vecinos en espera del resultado de su declaración de bancarrota, según el New York Daily News, que también obtuvo una queja enmendada de los vecinos que declara: “Los vecinos temen constantemente el colapso de la ladera. Los valores de sus casas están paralizados, y su privacidad y serenidad son invadidas por la estructura ilegal y desagradable que se cierne sobre ellos”.
En 2015, la ciudad presentó cargos por delitos menores contra Hadid por no obtener los permisos de construcción adecuados o cumplir con las órdenes del departamento de seguridad, según Los Angeles Times.
Hadid no impugnó los cargos, pero en 2017 se le ordenó completar el servicio comunitario y pagar multas.
